Correo
Salud digna, sin distinción
Señor director:
La situación que se ha evidenciado -una vez más- con respecto a las listas de espera en el sistema público de salud y la natural desolación que produce en millones de pacientes a lo largo de Chile, no puede dejarnos indiferentes.
La salud es y ha sido siempre una emergencia, de la cual el Estado no puede hacerse cargo solo. Es crucial alinear esfuerzos entre el sector público y privado, para generar soluciones innovadoras y de gran impacto para nuestro país.
Durante más de ocho años, Desafío Levantemos Chile, por medio de distintas alianzas público-privadas, ha logrado atender a más de 60.000 personas que se encontraban en listas de espera, demostrando que esta colaboración no solo es posible, sino también necesaria, especialmente cuando se trata de enfrentar algo tan urgente como las largas y dolorosas listas de espera en salud.
Con foco en la ejecución de operativos médicos, mejorar la gestión de hospitales y la disponibilidad de equipamiento e instalaciones, es posible avanzar rápidamente para superar esta emergencia.
Es necesario que el Estado, en conjunto con las instituciones privadas, abordemos de manera estratégica y coordinada esta crisis, tomando como referencia modelos exitosos de colaboración que buscan soluciones equitativas y sostenibles.
Tenemos que trabajar juntos para garantizar el acceso universal a una atención médica digna para todos los chilenos, sin distinción.
Ignacio Serrano, director Ejecutivo Desafío Levantemos Chile
Gasto público
Señor director:
En las últimas tres décadas, el gasto público per cápita se ha multiplicado por 5. De un promedio de $788.619 en1990, se llegó a $3.577.923, en 2023. Es prioritario advertir las consecuencias que esto genera en la economía nacional y recordar que las deudas se saldan, pero ¿quién las paga? los contribuyentes, es a saber, todos nosotros con los impuestos.
El acrecentamiento del gasto fiscal tiene efectos dañinos para la economía, dado que a mayor gasto, mayor deuda pública y en consecuencia los contribuyentes deben pagar más impuestos, lo que desincentiva la inversión y la productividad.
Por otra parte, el aumento del gasto público solo agranda el tamaño del Estado, por ende, se fortalece la burocracia, facilita el despilfarro de recursos, obstruye la libre competencia y promueve el nepotismo.
Debemos tomar en serio la advertencia de Holger Paulmann "Si seguimos aumentando más el gasto público que el crecimiento, vamos a terminar como Argentina".
Rubén Álvarez
Vivienda y previsión
Señor director: El déficit habitacional es una bomba de tiempo para nuestro país, y es un tema que puede ser abordado en conjunto con la reforma previsional donde se genere un círculo virtuoso en ambos temas relevantes.
La informalidad laboral imposibilita cualquier acceso a crédito hipotecario, en cambio quien cotiza con regularidad tiene acceso a crédito hipotecario junto con una seguridad social que lo protege en distintos eventos.
Para incentivar la formalidad laboral, una propuesta interesante sería que desde los fondos previsionales se pueda abonar un 10% del pie habitacional, con un tope de 300 UF por ejemplo, y que dicho aporte quede garantizado ser devuelto en caso de venta del inmueble, con un interés a definir, de un 2% real o 3% real, de manera que regrese el aporte entregado más una rentabilidad.
La PGU es un tremenda política pública de ingreso para la vejez, pero también se debe incentivar y potenciar el acceso a la primera vivienda propia, y por lo mismo la importancia que el 6% de cotización adicional vaya íntegramente a los afiliados.
Eduardo Jerez
Vasectomía: corresponsabilidad en la planificación familiar
Señor director:
En el marco de la conmemoración del Día del Hombre, la vasectomía emerge como una herramienta fundamental para la corresponsabilidad en la planificación familiar y la salud sexual.
La vasectomía es un procedimiento quirúrgico ambulatorio de bajo riesgo, con una efectividad superior al 99%. Consiste en bloquear los conductos deferentes, impidiendo el paso de los espermatozoides al semen. Es un método permanente que no afecta la función sexual ni la producción de hormonas masculinas, y cuya recuperación es rápida y sencilla. A diferencia de los métodos temporales, como los preservativos o los anticonceptivos femeninos que requieren constancia o monitoreo, la vasectomía ofrece una solución definitiva, segura y práctica.
En Chile, este procedimiento es accesible a través del sistema público de salud, gracias al Pago Asociado a Diagnóstico (PAD) de Fonasa. Sin embargo, es fundamental tomar esta decisión de manera informada y responsable, ya que, aunque existen técnicas de reversión, estas son costosas y no siempre exitosas.
A pesar de sus ventajas, la vasectomía aún enfrenta prejuicios y mitos que dificultan su aceptación. Históricamente, la responsabilidad de la anticoncepción ha recaído principalmente en las mujeres, quienes han asumido los efectos secundarios, los costos y el peso de esta labor desde la aparición de la píldora anticonceptiva en la década de 1960. Este procedimiento representa una oportunidad única para equilibrar estas cargas y avanzar hacia una corresponsabilidad genuina en la planificación familiar.
Es importante recordar que, aunque la vasectomía es efectiva para evitar embarazos, no protege contra infecciones de transmisión sexual (ITS). Por lo tanto, en relaciones con parejas nuevas o no estables, el uso de preservativos sigue siendo indispensable.
Adoptar la vasectomía es un acto que trasciende lo individual. Es un paso hacia la igualdad en la salud sexual y reproductiva, una muestra de compromiso con la pareja y una herramienta para construir una sociedad más equitativa.
Diego Rodríguez, Académico Escuela de Obstetricia UNAB