Complejas denuncias impactan en el Liceo Católico Atacama
EDUCACIÓN. Luego de que la semana pasada se diera a conocer una situación donde alumnos estaban compartiendo fotos de compañeras, ayer se reveló una acusación contra un inspector por conversaciones impropias con alumnas de enseñanza básica. La PDI confirmó que investiga dos casos. En tanto, el funcionario fue desvinculado, según el Centro de Apoderados.
Un agitado lunes se vivió al interior del Liceo Católico Atacama, en Copiapó, luego de que durante la mañana comenzara a circular una denuncia entre la comunidad educativa de que uno de los inspectores del establecimiento había sido descubierto teniendo conversaciones impropias con alumnas de 7° y 8° básico, algo que -según los denunciantes dicen- el establecimiento estaba al tanto desde hace aproximadamente un mes.
Esta denuncia llega luego de otra acusación de acoso al interior del establecimiento, donde un grupo de alumnos habían creado una cuenta de Instagram para compartir y puntuar fotografías de compañeras. En este contexto, un grupo de alumnós explotó e intentó entrar a la inspectoría para atacar al funcionario acusado.
Desde el Centro de Alumnos del emblemático liceo aseguraron que no estaba en sus planes iniciales el tomarse el establecimiento, pero que la falta de respuesta de parte del recinto educacional frente a estas acusaciones había terminado por cansar al alumnado y desatado su enojo.
Directo a inspectoría
De acuerdo con el relato de los alumnos, y lo que surgió en la denuncia y posterior funa en redes sociales, el funcionario habría estado sosteniendo conversaciones impropias, aunque no explícitas, con alumnas de enseñanza básica.
Catalina Carvajal, vicepresidenta del Centro de Alumnos del LCA, aseguró que tanto ellos como al alumnado les había llegado esta información en la mañana del lunes.
"No era nada explícito, pero sí eran conversaciones que hacían alusiones a cosas indebidas, por parte de él", aseguró.
Este relato fue compartido y amplificado por el alumnado, culminando en que los alumnos se tomaron el frontis del Salón La Merced, en un intento de entrar a inspectoría, buscando al acusado, que el colegio había puesto en esas oficinas.
Esto terminó con vidrios rotos y daños al mobiliario, ya que los alumnos se tomaron el Salón La Merced y sacaron sillas y bancas a las rejas.
"No nos estamos tomando el colegio. Cualquier intento de toma debe pasar por nosotros, el centro de alumnos, y no nos hemos reunido aún para discutir esta situación", dijo Carvajal. Por lo mismo, se citaron a las 18 horas de ayer para analizar dicha situación.
Durante horas de la tarde, el LCA, por medio de un comunicado, anunció que iba a suspender las clases por el día de hoy, para efectuar las reparaciones y aseo correspondiente.