El día 20 de octubre se dio inicio a los Juegos Panamericanos Santiago 2023, hito marcado por la participación de 664 deportistas que componen el "Team Chile", quienes con el transcurso del evento deportivo han pasado del anonimato a ser referentes para miles de niños, niñas y adolescentes que ven en el deporte un lugar donde desenvolverse en diferentes ámbitos.
El primer impulso lo dio Martin, sobre la bicicleta no sólo transmitió la emoción que desde niño emana cada vez que su cuerpo entra en contacto con el viento. Sobre ruedas y cerro abajo aparecen las primeras alegrías, pero también las enseñanzas para aquellos que ya lo admiran desde algún rincón de Chile y sueñan tan alto como él.
Luego fue el turno de la serenidad, la calma y la excelencia de Francisca, de su disciplina y perseverancia cayó el oro. Así mismo se fueron grabando nombres, Aranza, Hugo, Emile, Kristel, cada uno de ellos con historias diferentes, la diversidad inundó a Chile, Santiago, Tania, Natalia, dejaron grabados sus nombres derribando estereotipos y fronteras, con cada uno y una, un niño o una niña que soñó y lo consiguió.
También se hicieron parte de la fiesta los abrazos de gol, la Cote, Fernanda, Maxi, César, nos invitaron a soñar con las nuevas generaciones, a respetar y valorar a las y los deportistas, a comprender injusticias y a aplicar la resiliencia.
Los hermanos, los primos, emociones, victorias, derrotas, aprendizajes, 9 de oro, 23 de plata, 19 de bronce y aún queda para el cierre, sin duda desde cada vereda se encendieron las curiosidades de infancias y adolescencias, y también, se reforzó la idea de que el deporte puede transformar la realidad, así como el fútbol lo hace en esas 57 intervenciones donde Fundación Fútbol Más sigue construyendo desde allí, en el corazón de los barrios y las escuelas.
Que este incentivo sea el motor de nuevas políticas que promuevan y valoren el deporte desde su poder transformador, y así se mantenga en el tiempo el entusiasmo que esta, una de las delegaciones más numerosas en la historia representativa de Chile, instalaron en todo un país.
¡Que la fiesta deportiva continúe!
Filomena Valenzuela, cantinera del Batallón Atacama
Un día 29 de octubre de 1924 es sepultada en Iquique Filomena Valenzuela Goyenechea, cantinera del Batallón Atacama N° 1. Filomena nace en Copiapó en 1848. El esposo de Filomena era director de la banda del recientemente formado Batallón Atacama, al cual quiso incorporarse para estar cerca de su esposo y su hermano, que era subteniente del mismo batallón.
Como cantinera, se dedicó a curar heridos y a animarlos con presentaciones teatrales, ganándose el cariño de los soldados que la apodaban la "Madrecita".
Una mujer de gran talento vocal que junto a su esposo daba presentaciones en el Teatro Municipal de Copiapó antes de la guerra. A este teatro llegaban compañías que venían directamente desde Italia, y esto existió en la época del auge de las minas de plata de Chañarcillo, para crear un rico ambiente cultural y musical donde Filomena destacó.
En su rol de cantinera del batallón Atacama, participó en la toma de Pisagua el 2 de noviembre de 1879, y posteriormente en la batalla de Dolores el 19 del mismo mes. En la expedición de Moquegua, obtuvo el grado de subteniente por su arrojo en el "escalamiento (del cerro) de Los Angeles" el 22 de marzo de 1880.
Posteriormente es investida como subteniente del Ejército en reconocimiento de su abnegado desempeño, siendo la primera mujer que recibe ese honor.
Filomena prosigue la campaña del desierto y participa en la toma de Tacna y Miraflores en 1881, última fase de su carrera en el Ejército, con su regreso a Chile y la posterior disolución del Batallón Atacama, que la trae de vuelta a la vida civil, con los honores del caso.
Al finalizar la guerra, se dedicó a actuar en la compañía del Teatro Novedades de Iquique.
Fue sepultada el 29 de octubre de 1924 a las 17 horas, en el mausoleo Sociedad de Veteranos de 1879, nicho 33 en el Cementerio N° 1 de Iquique. La causa de su deceso fue una aneurisma cerebral.
Sus restos estuvieron por años en la Cripta de la Alameda Matta y luego del aluvión el año 2015, fueron depositados en el Cementerio de Copiapó.
En Iquique una calle importante lleva su nombre,y es una injusticia que esta mujer tan importante para la historia de nuestra región no tenga su reconocimiento, una estatua o lleve una calle su nombre para homenajearla. Aun podemos hacerlo.
Filomena Valenzuela, cantinera del Batallón Atacama, descanza en paz.