El etnoturismo como factor de desarrollo en el Valle del Huasco
TIERRA. Su familia creó vinos con cepas cultivadas en el sector Imperial y ella lidera este emprendimiento para hacer una nueva ruta turística en la Región de Atacama.
Con tan sólo 31 años, Camila Rojas Álvarez es una de las mujeres más destacadas en el ámbito del emprendimiento y rescate cultural en la Región de Atacama, que tiene atributos únicos en el mundo por su clima y geografía
Ella proviene de una familia de agricultores, que llevan más de tres décadas trabajando la tierra y obteniendo los frutos que sólo el Valle del Huasco puede entregar.
Así surge la idea de crear un vino para rescatar la identidad local, tradiciones y potenciar la cultura de esta zona del norte del país. Este proyecto lo concretaron en 2017 bajo la marca "Viña Tres Quebradas" (3Q).
Esta joven ingeniero civil explicó que el sector de Imperial, en Vallenar, se caracteriza por una vegetación que nace entre quebradas y un sol radiante durante casi todos los días del año, atributos que entregan un sello particular a sus productos, y en especial, a los elaborados por 3Q.
"Soy una enamorada de mi tierra, fanática de su cultura y tradiciones. Este emprendimiento ese eso. Mi familia es de agricultores, personas que llevan años trabajando la tierra obteniendo frutos típicos de la zona. Esos productos que sólo este valle puede dar, proporcionando un sabor y sensaciones únicas, que al probarlo, en cualquier parte del mundo, inmediatamente serás transportado a las tierras del Valle del Huasco", comentó .
Camila destacó que 3Q es una empresa familiar, donde resalta el proceso productivo de sus vinos con identidad regional, incluyendo su etiqueta confeccionada con arte local. Además, precisó que sus cepas Garnacha y Malbec, cuentan con denominación de origen (DO) por su producción en el Valle del Huasco y donde el sello de su liderazgo está presente en el impulso de este emprendimiento en Atacama
"Es un sueño familiar. Fue mi madre una de las impulsoras para que esto viera la luz. Un hito relevante que nos tiene a todos felices como familia y que ocurrió en 2020. En aquel año obtuvimos nuestra primera producción de Malbec, Garnacha y Late Harvest. Todo esto lo concretamos luego de muchos estudios, principalmente para rescatar el terroir de nuestra tierra atacameña", explicó.
En este sentido, resaltó orgullosa que, actualmente la viña que lidera, se comercializa a todo el país, a través de sus redes sociales y su página web. Pero junto con lo anterior, se viene una iniciativa que potenciará aún más la marca 3Q y el turismo en el Valle del Huasco.
"Como desafío proyectamos complementar nuestra producción vitivinícola con el etnoturismo y así tener una experiencia completa con catas de vino, paseos de exploración y alojamiento", comentó.
Detalló que "al interior de la viña hemos adaptado una vieja casona para recibir visitantes, quienes podrán pernoctar e impregnarse de la cultura vitivinícola de la zona. Conocer los procesos de producción y, aunque suene muy autorreferente, el porqué estoy enamorada de esta tierra, su gente y su cultura".