Hace 2 semanas nos reunimos, junto a 600 personas en el centro cultural Atacama, con la ministra del Trabajo y Previsión Social, Jeannette Jara para abordar uno de los temas que menos se habla sobre la reforma de pensiones que es cómo viven los pensionados o mejor dicho, cómo sobreviven en nuestro país quienes dependen únicamente de sus pensiones.
Esta afirmación, que le pertenece a la propia secretaria de estado, se sustenta en que, lamentablemente, desde que se comenzó a discutir la reforma de pensiones se ha hablado harto de temas como la libertad de elegir y del resguardo a la propiedad privada, pero no lo suficiente respecto a que, de ser aprobado el nuevo sistema mixto, los montos de las pensiones mejorarían a partir de ahora, que es lo que esperamos quienes estuvimos ese día en Copiapó, en una de las convocatorias más masivas que tuvo la gira ministerial en el norte de Chile.
Para quienes vivimos y trabajamos en la provincia de Chañaral - y en particular para las dirigentas e integrantes de las organizaciones sociales de las comunas de Diego de Almagro y de Chañaral que viajaron ese día poco más de 150 kilómetros para participar en el encuentro - un momento clave fue cuando la ministra resaltó que el debate, que se está dando desde enero de este año, no apunte a lo que provoca la propia reforma que es precisamente si suben o no las pensiones. Esto porque, hasta ahora, la única certeza que existe es que nadie llega a final de mes con las actuales pensiones.
Y uno de los aspectos que modifica radicalmente la propuesta del sistema mixto, que apoyamos, es precisamente un aumento inmediato de las pensiones, gracias a la creación de un fondo social que se constituirá con parte del aporte, inexistente hasta ahora, del 6% por parte del empleador, que se sumará al aporte del estado y de los propios trabajadores que es de un 10%. La idea es que a mayor porcentaje del fondo, mayor será la mejora de las pensiones.
Por eso, cuando en redes sociales se publican afirmaciones del tipo "no quiero que le pasen mi plata a los flojos" aludiendo a que este sistema no valora el esfuerzo personal, nosotros rotundamente decimos que eso es mentira. ¨Porque precisamente gracias a ese nuevo aporte, que ya se había propuesto en el mandato de la presidenta Bachelet se mejorarán, de inmediato, las pensiones para quienes ya están jubilados.
Para ello, necesitamos que esta reforma sea aprobada en el Congreso en el que, si bien no somos mayoría, todos tenemos la expectativa se haga cargo de tanta inequidad que el actual sistema de pensiones mantiene hacia las mujeres y adultos mayores.