Correo
Víctor Jara y activismo a la jurídica
Señor director:
La pronunciación definitiva de este lunes por la Corte Suprema con respecto a la sentencia del emblemático caso de Víctor Jara, a 15 días de la conmemoración por 50 años del golpe de estado no parece coincidencia.
No es menester de esta carta hablar de la sentencia desde un punto de vista jurídico ni de la relevancia histórica del cantautor, pero es importante destacar que enciende las alarmas por una eventual intención de "activismo jurídico" de parte de los jueces, que podemos ver aparentemente en este tipo de sentencias de alta conmoción social y política. es por ello que no es concebible que por incidencias sutiles de la tendencia política que sea, o por presiones sociopolíticas no se respeten los principios de independencia del poder judicial, el debido proceso y las garantías Constitucionales propias de todo Estado de derecho, es por ello de la importancia de estar atento y presente al sonido de estas alarmas de cuando se mezcla la política con la justicia y la posibilidad de infringir principios establecidos desde hace ya varios siglos.
Felipe Jara S. Fundación para el progreso
La otra "deuda histórica"
Señor director: Los efectos de la pandemia en materia educacional fueron devastadores. Las primeras estimaciones calculan una pérdida de entre un 50% y un 80% de un año académico a nivel global. Para Chile, debido a su inusual tardía para retomar las clases presenciales, el impacto se calcula en más de un año escolar. Esto tiene costos para toda una generación de estudiantes, que no podrá recuperar la totalidad de los aprendizajes perdidos, costos económicos para el país y costos de salud mental para niños y sus familias. Y en nuestro país ya estamos atrasados en dar una respuesta efectiva.
En este contexto es que se comunica la decisión del Colegio de Profesores de iniciar un paro indefinido que podría afectar a más de 5 mil colegios. Esto es similar a que se hubiera aprobado una paralización de Conaf en medio de los incendios forestales de 2017, o de profesionales de la salud durante el Covid en 2020. Es legítimo que el gremio vele por los intereses de sus colegiados, pero no es justo que lo hagan en medio de una crisis de esta magnitud, impidiendo que niñas y niños puedan recuperar de forma urgente el tiempo perdido.
José Antonio Valenzuela, Pivotes
Relaves abandonados
Lo ocurrido con la polución de partículas de relaves mineros producto de los trabajos de la transnacional empresa Candelaria, que invadió la atmósfera de Tierra Amarilla hace unos días, incentivado todo por los vientos desatados, ha restablecido el tema de las acumulaciones de minerales que existen en casi toda la región por el trabajo minero intenso que se practica en la región hace más de un siglo.
La historia de abandonos de relaves es amplia en Atacama. Desde los años 80 que la empresa minera Sali Hochschild dejó abandonados más de veinte millones de toneladas de desechos de cobre en la ladera sur del río Copiapó, a cinco cuadras de la plaza. Los vientos moderados de todos los días levantan el polvo mineralógico que invade las poblaciones aledañas, afectando a las comunidades que habitan en la salida sur de la ciudad.
El denominado Río Salado, provincia de Chañaral, desde siempre ha servido como afluente de los residuos mineros de la ex minera norteamericana a la actual nacionalizada El Salvador que, obviamente, embancaron la bahía de Chañaral en uno de los atentados medio ambientales más graves de la historia de Chile y del cono sur de América.
Es indudable que la minería mediana y pequeña ha sido descuidada en el tratamiento de sus ricos desechos por la forma precaria que tienen de trabajar, no obstante los apoyos de la estatal Enami traducidos en dineros que el sector debe retornar al Estado.
Los trabajos de la minería deben ser fiscalizados por el estado de Chile para evitar los daños que produce en el medio ambiente y en la comunidad humana. Dirigentes de los poderosos gremios mineros nacionales califican como "problemas para el sector" las exigencias medioambientales de los organismos estatales, lo que advierte el tipo de importancia que le otorgan a la protección al medio ambiente de todos.
Lo ocurrido en Tierra Amarilla con los relaves de Candelaria recientemente, debe poner en alerta a las autoridades con los numerosos relaves que se distribuyen por Atacama.
Sobre todo, es preciso preguntar a Sali Hochschild que hará con sus millonarias toneladas de relaves que podrían provocar una catástrofe de dimensiones insospechadas en una de las capitales de la minería del norte de Chile.
Osman Cortés Argandoña
Flexibilizar el 17 de diciembre
Señor director: El próximo 17 de diciembre los chilenos concurriremos nuevamente a las urnas para pronunciarnos sobre la nueva propuesta del Consejo Constitucional. Un acto cívico de gran importancia, nacido de un proceso político legítimo y necesario.
El único detalle es que la fecha corresponde al último domingo antes de Navidad, época clave para el comercio y los consumidores. De acuerdo a información de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), diciembre supera en cerca de un 40% las ventas de un mes normal. Y si bien la Ley 18.700, Orgánica Constitucional sobre votaciones populares y escrutinios de elecciones, no aplica para todo el sector, los centros comerciales y muchas instancias comerciales que surgen en esa época, como las ferias de emprendedores y los bazares navideños, la entretención y gastronomía que estos albergan, deben cerrar.
Y según una encuesta de la Red de apoyo a las Mipyme, ChileConverge, el 60% de las ventas de Navidad de estas empresas se producen el fin de semana previo a Navidad.
Entonces, estamos frente a un panorama que golpeará nuevamente al comercio, el primer empleador del país, fuertemente afectado por la situación económica de los últimos tres años.
Si las elecciones en nuestro país son un ejemplo internacional en cuanto a comportamiento, educación cívica y funcionamiento del servicio electoral, ¿por qué no flexibilizar las medidas de funcionamiento del comercio?
La del 17 de diciembre será la séptima elección desde mayo del 2021, fechas en las que el comercio (salvo excepciones) ha estado impedido de funcionar. Y los próximos años, el 2024 y el 2025, deberemos una vez más concurrir a las urnas para ejercer nuestro deber cívico. Si no logramos mayor flexibilidad, serán más de diez jornadas menos para miles de grandes, medianas y pequeñas empresas que dan empleo y contribuyen al desarrollo del país. Razón suficiente para flexibilizar la apertura del comercio sin discriminación en esa fecha .
Katia Trusich, presidenta Cámara de Centros Comerciales de Chile