Tras un año y dos meses del robo que terminó con la vida de Cristian Arancibia, quien era el administrador de la empresa Starken en Copiapó, su recuerdo vuelve a estar patente, ya que ayer el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal condenó a tres involucrados, mientras que se desconoce el paradero del resto de la banda.

Fue el 7 de junio del año pasado en Copiapó, el día en que la víctima fue seguido por distintos sectores de la ciudad por un vehículo con cuatro ocupantes, quienes se concertaron para conocer los movimientos del afectado a quien interceptaron cuando éste llegó a la oficina de Starken ubicada en el interior del centro comercial Paseo San Fernando.

Alrededor de las 12.30 horas los ocupantes del auto lo abordaron con la finalidad de robarle 26 millones de pesos que el administrador había retirado momentos antes de una casa bancaria, quien opuso resistencia para evitar el robo, sin embargo en ese instante fue atacado con un arma de fuego que portaba uno de los condenados, los que le causaron heridas de tal gravedad que originaron el fallecimiento de la víctima. Según un informe del Servicio Médico Legal, la víctima murió debido a un trauma toraco abdominal por bala, sin salida de proyectil.

Instantes más tarde llegó al lugar del homicidio un vehículo patente KGGW-73, a observar a la víctima quien había sido dejado botado en el suelo luego de haber sido baleado mortalmente y habérsele sustraído el dinero. Luego, todos los involucrados en el crimen reunieron en el sector de pasaje Las Tinajas, Paipote, comuna de Copiapó, lugar donde vive uno de los sujetos que participó en el asalto. Es allí donde tomaron contacto con una mujer quien llegó en un vehículo y proporcionó ayuda para la huida de los involucrados.

Luego del homicidio la Fiscalía solicitó diligencias a ambas policías, una de los datos importantes fue la patente de uno de los vehículos, ya que el OS7 de Carabineros lo vinculaba con otra causa penal.

Con la investigación se pudo establecer que la identidad de tres de los siete implicados en el hecho, el autor de los disparos Henry Godoy Adao conocido como el "cara de pena", Matías Maza Contreras, uno de los ocupantes de uno de los vehículos y Jaritza Reynoso Araya, la mujer que los ayudó a escapar.

El 30 de junio del año pasado fue detenida Jaritza Reynoso conocida como la Jari, quien quedó en prisión preventiva, posteriormente corrieron la misma suerte Matías Maza y el autor de los tres disparos fatales, Henry Godoy.

La investigación del caso y la argumentación de los medios de prueba estuvieron a cargo del fiscal adjunto de esta ciudad, Sebastián Coya, quien se hizo presente en el lugar del crimen a los pocos minutos de ocurrido. Ocasión en que ordenó inmediatas y amplias diligencias a ambas policías.