Cada vez son más las personas jóvenes que están sufriendo complicaciones cardíacas e infartos al miocardio. Una situación alarmante, considerando que este tipo de patologías suele afectar a personas mayores, y pese a que las estadísticas indican que el 65% de los infartados hospitalizados en Atacama son pacientes sobre 60 años, la incidencia de enfermedades coronarias en la población de menor edad va en aumento.

El dr. Sergio Díaz, jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Regional de Copiapó, manifestó que "hemos registrado pacientes infartados de 25, 30 años en adelante. Se observa una mayor incidencia de pacientes jóvenes, específicamente a partir de los 30 años, tanto hombres como mujeres que presentan infartos".

Una situación que de acuerdo al médico especialista está asociada al tabaquismo y otros factores de riesgo, como alimentación poco saludable, altas en sal y grasas saturadas, el sedentarismo y el exceso de alcohol, lo que afectaba aun más a pacientes mayores.

"Por lo tanto, si una persona joven tiene alguno de estos factores de riesgo es importante que solicite atención en su Cesfam para evaluar y controlar dichos factores ya que existe tratamiento farmacológico y no farmacológico asociado a cambios de estilos de vida", precisó el Dr. Díaz.

Respecto a las cifras, en los hospitales de Copiapó y Vallenar, se han hospitalizado durante este 2023 a 178 pacientes por infarto, el 1,1% en menores de 29 años, el 3,7% en personas entre 30 y 39 años, un 11,2% entre los 40 y 49% y un 18,7% en quienes tienen entre 50 y 59 años, mientras que el grueso de los casos continúan siendo los mayores de 60, con un 30,5% entre los 60 y 69 años y 34,8% en mayores de 70.

Ahora bien, según el jefe del Servicio de Cardiología, los infartos en pacientes jóvenes van a ser cada vez más frecuentes. "Eso se debe a que el mundo globalmente es cada vez más desarrollado y eso ha conllevado a que los jóvenes, los niños, los adolescentes, tengan hábitos distintos a los que teníamos quizás nosotros, nuestros padres o abuelos, que eran estilos de vida más sanos".

Además de eso, los hábitos de diversión también han variado, ya que, hoy en día los niños, niñas y adolescentes pasan más tiempo en las pantallas y menos realizando actividades deportivas, lo que se sumaba a los malos hábitos alimenticios.

"Esto es una combinación fatal al momento de hablar del desarrollo de las placas ateroscleróticas, que es parte del contínuum de la enfermedad cardiovascular. Estos dos factores iniciales van a desarrollar lo que son factores de riesgo intermedio dislipidemia, que es aumento del colesterol, hiperglicemia, aumento de la glicemia en sangre obesidad, hipertensión arterial y a estos factores también se suma el tabaquismo que cada vez se acentúa más en nuestros jóvenes. Entonces estos jóvenes que vienen vía sedentaria, mala alimentación, ya desde muy joven van formando enfermedad aterosclerótica, se le suma hiperglicemia, quizás hipertensión arterial y además tabaquismo desde muy temprana edad, que lo vemos tanto en hombres como en mujeres, lo que favorece a que cada vez tenemos pacientes más jóvenes con infarto al miocardio", precisó el médico.

En ese contexto, explicó que el infarto era la consecuencia de la enfermedad ateroesclerótica, que era el envejecimiento precoz del árbol arterial, específicamente el coronario, por lo que los estilos de vida actuales propiciaban el envejecimiento precoz de las arterias que nutren al corazón y la factibilidad de que se produjera un infarto era mucho mayor al de una persona con hábitos saludables.

"Es por eso que siempre invitamos a la prevención y sobre todo invito a la población joven a mantenerse haciendo actividad física, evitar el tabaquismo, cero tabaco, cero tolerancia al humo, evitar igual el alcohol y asimismo diagnosticar precozmente si es que existe un factor de riesgo intermedio como ya lo he mencionado anteriormente, diagnosticarlo y tratarlo precozmente porque así evitaríamos el final de esta enfermedad que es un infarto", destacó.

Factores atípicos

El Dr. Luigi Gabrielli, cardiólogo e investigador ACCDiS-Facultad de medicina UC, comentó que los infartos y enfermedades coronarias en pacientes jóvenes tenían una incidencia que es menor a la población mayor. No obstante, el diagnós-

"Es importante recalcar la prevención, ya que es el mejor tratamiento que existe para el corazón. La conducta que tomamos en el día a día es la que va a repercutir en desarrollar una enfermedad cardiovascular o no"

Dr. Sergio Díaz, jefe del Servicio Cardiología, Hospital Regional de Copiapó

"Muchas veces los infartos en personas menores están ligados a algunos factores de riesgo que nosotros llamamos "atípicos", por ejemplo, al uso de drogas atípicas, como la cocaína"

Dr. Luigi Gabrielli, cardiólogo e investigador ACCDiS, Facultad de medicina UC