E l tercer cambio de gabinete del Presidente Gabriel Boric trajo diversas reacciones. Se le calificó como "maquillaje", "acotado" o bien como "importante" para los más de dos años que restan de Gobierno.

Pero el que podría calificarse de forma transversal como "cirugía mayor" es el de Ministerio de Minería. Marcela Hernando salió como ministra, cargo que ahora es ocupado por Aurora Williams, mientras que como subsecretaria está Suina Chahuán en reemplazo de Willy Kracht. En Enami también hay nuevo vicepresidente dado que asumió Iván Mlynarz en reemplazo de Jaime Pérez de Arce.

Los cambios parecen no tener dobles lecturas: había que hacer movimientos dadas las divergencias que hay en torno a la nueva Fundición Paipote, a lo que se sumaría el atraso en la estrategia del litio, de acuerdo a lo informado por medios como Emol.

Parece urgente contar con definiciones en estas materias. En lo que atañe directamente a Atacama, la nueva fundición más que una esperanza o una solución a episodios contaminantes, se ha transformado en foco de incertidumbre dado los análisis sobre su rentabilidad. Kracht habría dicho que el proyecto no lo era, mientras que Pérez de Arce comentó a Diario Atacama que "no es efectivo que el proyecto tenga una rentabilidad negativa evaluada, porque lo ven desde el punto de vista privado".

¿Cómo podrán lidiar las distintas opiniones y análisis en torno a esta iniciativa?

Pareciera que es preciso sumar a distintos actores no solamente en Minería, sino que otros como Vivienda y Urbanismo y gremios vinculados al día a día de la ciudad, dadas las otras implicancias que se puedan generar en torno a los vecinos de Paipote.

Ayer anunciamos, a través de los medios de comunicación, acerca del trabajo colaborativo que estamos impulsando junto al Gobierno Regional para contribuir al desarrollo productivo de Atacama. Se trata de cuatro convenios, por un total de 1.744 millones, que apuntan a implementar acciones, a través de los programas e instrumentos de Corfo, para promover a las industrias creativas, al sector energético, frutícola y a los productores de aceite de oliva con Denominación de Origen (D.O.).

En el caso de las industrias creativas, estos recursos permitirán la apertura del instrumento Iniciativa de Fomento Integrada (IFI) Audiovisual de Corfo, cuyo objetivo es generar atracción de inversiones audiovisuales. Gracias al convenio de D.O. del aceite de oliva se dispondrá de un programa de la línea de Bienes Públicos de Corfo que permitirá contar con un protocolo para la gestión y administración de la D.O. permitiendo sumar a más productores y fortalecer a los actuales. Mientras que el convenio de Fruticultura tiene como propósito convertir a la región de Atacama en un actor relevante en la producción frutícola sustentable con valor agregado y diferenciado por sus condiciones propias de desierto. El último convenio tiene relación con el desarrollo de las energías renovables y sus vectores para el crecimiento económico sustentable de la región de Atacama que busca impulsar un levantamiento de iniciativas estratégicas que aporten al crecimiento de esta industria.

Los convenios ya están formalizados y si bien la implementación se desarrollará en un plazo de tiempo de dos a tres años, las primeras acciones se podrán materializar en el último trimestre de este 2023.

Esta alianza es fundamental para el desarrollo productivo de Atacama y apunta a impactar en estos sectores estratégicos. Queremos contribuir a la diversificación productiva de la región desde una mirada de desarrollo territorial, equidad de género y sustentabilidad. Lo anterior nos permitirá avanzar y acompañar a las empresas locales en su transición a un modelo de desarrollo productivo sostenible acorde a las necesidades actuales y de cara a los desafíos futuros.