Correo
Bono de reconocimiento 2.0
Al crear el sistema de capitalización individual en 1980, a las personas que se cambiaron al nuevo sistema previsional se les reconocieron las cotizaciones en el antiguo sistema de reparto vía bono de reconocimiento, el cual era un monto reconocido inicial con una rentabilidad de UF+4% anual hasta cumplir la edad de pensión, momento en que el Estado hace efectivo dicho bono de reconocimiento depositando el dinero en la cuenta previsional del trabajador.
Hoy en día, un bono de reconocimiento 2.0 podría destrabar completamente la problemática del destino de la cotización adicional del 6%, pues se podría destinar un porcentaje de la cotización inicial de manera directa a la capitalización individual, un 4%, por ejemplo, y el otro 2% destinarlo a mejorar las actuales pensiones, pero reconociendo ese aporte vía bono de reconocimiento, a una rentabilidad de UF+3%, por ejemplo, que se le devuelva al afiliado al cumplir la edad de pensión.
Un bono de reconocimiento 2.0 satisface los objetivos previsionales de todos los sectores políticos, en la medida que estos efectivamente sean mejorar las pensiones en el corto y largo plazo.
Eduardo Jerez Sanhueza
Reforma previsional
Respecto a la eventual reforma al sistema de pensiones en trámite legislativo, si al Presidente le importa más la gente, según lo ha declarado recientemente; si los postulados del Gobierno, a través de sus representantes, han tenido dos sendas derrotas electorales consecutivas y si todas las encuestas muestran una abrumadora mayoría para que el eventual incremento del 6% de la cotización previsional vaya a la cuenta de capitalización individual, que los dineros acumulados en ellas sean heredables y exista libertad de elegir al administrador del fondo de pensiones, ¿qué no entiende el Gobierno ?
Sergio Cabezas
Uso de fondos
¿Qué le parece que nos den vuelta la cara y no observen que hay un porcentaje alto de nuestra gente que no vivirá más de 70 años, pero aun así se niegan a dar la gran oportunidad de retirar algo de nuestros fondos de pensión de manera voluntaria?
Luis Alfonso Jara Riquelme
Inserción laboral
Los resultados de la reciente encuesta Casen del año 2022 evidencian una disminución de la pobreza por ingresos respecto de 2020, e incluso de 2017, volviendo a la trayectoria de disminución de la pobreza por ingresos que teníamos como país, lo cual es una muy buena noticia.
En esta disminución jugó un rol preponderante la entrega de subsidios. En efecto, en el primer decil de ingresos, los ingresos del trabajo están aún muy por debajo de los niveles de prepandemia, pero los subsidios están en niveles más altos a lo que el país estaba acostumbrado. El efecto de los bonos entregados desde la pandemia en adelante, como el IFE Laboral, el Subsidio Protege, la creación de la PGU, entre otros, durante el gobierno anterior, así como el aumento del Subsidio Único Familiar o el bono canasta básica en este, han sido clave.
Sin embargo, el gran desafío por delante es cómo potenciamos nuestro mercado laboral, actualmente alicaído, y cómo apoyamos a nuestros trabajadores, sobre todo a los más vulnerables, para insertarse y contribuir de forma exitosa en él, para así sostener y avanzar en esta disminución de pobreza no sólo en subsidios, sino en las capacidades de tener ingresos autónomos por nuestros trabajadores, no olvidando que la mejor política social es el empleo formal y bien remunerado.
Karla Rubilar Exministra Desarrollo Social y académica U. Autónoma
Clases de cueca
Estamos cerca de celebrar un nuevo aniversario de la Primera Junta de Gobierno de Chile. ¡Fiestas Patrias! No obstante, para muchas de nuestras autoridades es un verdadero martirio asistir a las ceremonias oficiales y tener que salir a bailar cueca. Esto no sucedería si tomaran conciencia que es una obligación, como nuestros representantes, saber bailar nuestra danza nacional como corresponde y no salir al ruedo solamente por cumplir.
Desde alcaldes hasta las más altas autoridades ya tendrían que estar tomado clases para que cuando corresponda lo hagan dignamente.
Jorge Valenzuela Araya
Pacto fiscal
Para el desarrollo económico, un pacto fiscal, que utilice como eje una reforma tributaria resulta muy necesario. El país requiere de una mayor recaudación tributaria, para gastar más en seguridad, educación, salud y pensiones. Además, se debe suplir el déficit estructural -endeudamiento-, ya que el Estado espera gastar más de lo que recibe.
Hoy, las proyecciones económicas no son favorables. Si se suben los impuestos, será difícil separar el efecto que se produzca del cambio de impuestos en la economía y el efecto de una recesión. Esto puede generar expectativas más negativas para la economía, repercutiendo en la actividad económica. Por tanto, el gobierno debe ser muy preciso en lo técnico, para que el mercado no sobrerreaccione ante una modificación impositiva.
Una reforma tributaria que intenta recaudar más debe apuntar a hacerlo de mejor forma, minimizando los efectos de comportamiento de los impuestos. Por ejemplo, en el caso de un aumento en el impuesto corporativo, una forma de aminorar su efecto negativo en la inversión es por medio de la depreciación acelerada, beneficio que fomenta la inversión de cualquier empresa, incluyendo las pymes.
Sobre la productividad por trabajador, esta ha estado estancada. El gasto de gobierno puede ayudar a mejorarla, por medio de inversión pública, mejorar la educación y ayudando a reducir barreras para la movilidad intergeneracional.
El gobierno necesita un acuerdo, más allá del gobierno de turno, para los próximos 10 años. Si este pacto no tiene la envergadura adecuada, tendremos una discusión similar en los próximos dos años.
Pablo Gutiérrez Académico Departamento de Control de Gestión y Sistemas de Información Facultad de Economía y Negocios Universidad de Chile