Concejo municipal no renueva patente a ocho locales en Copiapó
VOTACIÓN. Área 51, Piscología, Kaya, Matanza, La Torre, Bijoux, Mediterráneo y Casa Delta tienen cinco días para presentar un plan de mitigación - a modo de apelación - para subsanar los problemas planteados por la comunidad.
Quejas de ruidos molestos, autos mal estacionados, aumento de criminalidad, realización de eventos sin contar con los permisos necesarios y falta de fiscalización fueron los puntos que marcaron el debate del Concejo Municipal de ayer en Copiapó, en donde de determinaba la renovación de las más de 300 patentes de alcoholes de locales en la ciudad, donde se terminó votando en bloque por la mayoría, pero 16 fueron individualizados por la cantidad de quejas existentes en su contra.
Durante las más de ocho horas que duró la sesión, expusieron, junto a los concejales, representantes de juntas de vecinos del sector Alameda y los administradores de los locales en cuestión. Sin embargo, pese a las denuncias de los vecinos, existen muy pocas evidencias concretas que avalen la validez de los reclamos. Desde diciembre del año pasado a la fecha se han realizado 168 fiscalizaciones municipales a lugares de expendio de alcohol, de las cuales 23 han resultado en infracciones por no cumplimientos de horario de cierre, falta de visibilidad de patente u otras fallas técnicas.
Sobre los ruidos molestos, el mismo concejo reconoció que, por ley, es una fiscalización que corresponde al Ministerio de Medio Ambiente, quienes son los responsables de hacer cumplir el decreto 38, del año 2011, en el cual se establece el número máximo de decibeles que se permiten permen de los locales a la calle. Bajo esa normativa, entre las 21 horas y las 7 de la mañana el volumen máximo que debe registrarse en el ambiente es de 45 decibeles "que equivale a una calle de poco tráfico", acorde al ordenamiento.
Última ronda
Luego de que se aprobaran en bloque la renovación de las 163 patentes que contaban con todos los antecedentes al día, es decir presentaron certificado de antecedentes y una declaración jurada; y la aprobación condicional de 177 más que deben presentar dichos documentos y cuentan hasta el 31 de julio para hacerlo, se pasó a debatir 14 locales en particular.
Estos fueron los bares Fraga, Otaku, Área 51, Tercera Estación, Piscología, Euforia, Kaya, Matanza, La Torre, Bijoux, Lúpulos, Tololo Pampa, Casa Delta, Mística, Mediterraneo y Pepe bar y cantina.
Todos los nombrados contaban con quejas por parte de los vecinos por ruidos molestos, además de incumplimiento de normas de funcionamiento, como realizar eventos de música en vivo pese a no contar con los permisos necesarios, impedir el ingreso de Carabineros o fiscalizadores municipales y servir solo alcohol sin comida, pese a contar con patente de restaurante.
"Este es un problema de convivencia entre ciudadanos. Hay diferentes elementos, porque se ha hablado del tema del ruido, pero también se generan externalidades como el incremento de la violencia, los asaltos, el gran flujo de personas en el sector y problemas de estacionamientos. El tema del sector Alameda es un problema integral que requiere soluciones integrales, que requiere del concurso de autoridades municipales como regionales", afirmó el concejal Juan Manuel Cáceres, quien también afirmó que falta una mayor fiscalización municipal para dar cuenta de los incumplimientos de locales.
Para Cáceres este último punto juega en contra, puesto que sin la existencia de multas a los locales no se puede acreditar frente a juzgados el incorrecto funcionamiento de los mismos.
En la misma línea, la concejala Carolina de la Carrera afirmó que esto terminará siendo un llamado de atención a todos los locales nocturnos de la ciudad, puesto que se volverá a revisar las patentes en diciembre. Ella, junto a la concejala Katherine Araya, votaron en contra de renovar las patentes de 10 de los locales cuestionados.
"Da como lástima porque el año pasado pasamos por este mismo proceso, donde también pedimos que existan más infracciones cursadas que luego nos respalden en las decisiones que tomemos. En la actualidad estamos viendo como muchos locales infringen abiertamente las actividades que realizan y ocupan patentes que todos sabemos que no poseen. Y hoy nuevamente no tenemos todas las herramientas pese a todas las denuncias de la ciudadanía", afirmó.
Es así como se decidió que Área 51, Piscología, Kaya, Matanza, La Torre, Bijoux, Mediterráneo y Casa Delta quedaran con la patente de alcoholes revocada. Luego de la decisión, los locatarios tienen un plazo de cinco días para apelar al consejo, presentando un plan de mitigación de ruidos y solución de los problemas planteados, a fin de que se les renueve la patente.
Llamado de atención
"Inmediatamente se haga la apelación, se puede dar una resolución en el siguiente concejo ordinario o realizamos uno extraordinario para ver cada caso", afirmó el alcalde Marcos López, quien espera que los locales afectados presenten un plan de mitigación de ruidos molestos y no continúen realizando eventos de música en vivo, puesto que no cuentan con los permisos. De no aceptarse, los locales deberían cerrar sus puertas el próximo 31 de julio.
Pese a que en las votaciones el edil falló a favor de los 16 locales en cuestión, afirmó que el concejo es un ente autónomo y respeta la decisión tomada. Espera que los locatarios presenten un plan sensible para poder solucionar el problema. Por lo mismo considera el fallo como "un llamado de atención a todos los locales que deben empezar a trabajar en conjunto a la comunidad".
Frente al aumento de la criminalidad en el área, el alcalde López pretende proponer restablecer el horario de cierre a las dos de la mañana, lo cual fue recibido con desaprobación por algunos concejales. Por lo mismo se planteó la idea de un futuro plebiscito municipal para zanjar el asunto.
Tras la determinación del concejo, varios ediles se reunieron con los locatarios sancionados para determinar posibles soluciones, siendo una de las mencionadas el techar las áreas de fumadores que los locales poseen. Los afectados se mostraron receptivos a la idea de una pronta reunión con el concejo para desarrollar un plan conjunto que les permita mantener el funcionamiento.