Los recientes resultados de la última prueba Simce rendida el año 2022, post pandemia, por los 4º básicos y 2º medios, arrojaron resultados preocupantes, donde hubo una notoria baja en lectura y matemáticas, lo que podría ser indicativo de un deterioro sostenido de la educación formal en Chile.

Las razones de este descenso, sin duda son multi causales, la suspensión de clases en el periodo de pandemia es tal vez uno de los factores más significativos, pero también lo fue el que una parte importante del mundo escolar no cuenta con las herramientas computacionales y de conexión a internet, para que por esa vía haber contrarrestado la baja en los aprendizajes. Pero sin duda hay otros factores, como la formación inicial de docentes, los financiamientos al sistema educativo, el rol de los Servicios Locales de Educación (SLEP), etc. Lo cierto es que este deterioro como siempre afecta a las y los estudiantes más vulnerables.

Ahora, veamos como los Museos podrían, en mi opinión, apoyar para mejorar los aprendizajes, y no hablemos solo de historia, ciencia o arte, sino que de todo el proceso educativo.

El escritor de ciencia ficción Arthur C. Clark, con relación a los museos, ha dicho: "No hay como los museos para calmar la mente, para ver los problemas de la vida cotidiana es su real perspectiva". Decir al respecto que la educación, es una problemática humana de tiempos largos, y por tanto debe analizarse con la mente serena, para poder dimensionarla en toda su potencia y proyección de futuro. Un museo, entonces se transforma en una incubadora de ideas para la pedagogía y la educación donde esta tenga un total sentido de pertenecía y donde los estudiantes se sientan cómodos, pero a la vez desafiados a nuevos retos.

Los académicos Jay Greene, Brian Kisida y D. Bowen, de la universidad de Arkansas, en sus estudios sobre niños y niñas en edad escolar que asisten a los museos, pudieron concluir lo siguiente; Visitar museos genera pensamiento crítico, empatía histórica y capacidad de tolerancia. Y podemos agregar que desarrollan sensibilidad por el arte y la cultura. De esta forma un museo, prepara propedéuticamente a los escolares a que los procesos de enseñanza y aprendizaje les sean significativos.

El museólogo, Hugues de Varine - Bohan, quien fue secretario ejecutivo del Consejo Internacional de Museos, dice que los Museos son la universidad del pueblo, visto desde esa perspectiva, el museo es un espacio altamente educativo, ya que el ser humano se refleja y se comprende en su propio patrimonio, lo que conlleva a que se prepara para estudiar conscientemente.

Por tanto, sin ser la solución, sino que solo una pequeña parte de ella, pensamos y proponemos que visitar regularmente los museos, predispone positivamente a querer ser educados y sobre todo a que en este proceso, el alumno y la alumna sean sujetos participantes siempre activos, inquietos y críticos.

Los museos, tal vez, puedan ser una pequeña ayuda para comenzar a destrabar los problemas de la educación en Chile.

La Asociación Nacional de Jugadoras de Fútbol Femenino alzó la voz después del bochornoso y vergonzoso arranque de los campeonatos del balompié "profesional" femenino. Un cúmulo de situaciones polémicas marcaron para mal el inicio de una competencia que tardó nueve meses en ver la luz.

Solo por citar algunos ejemplos de la primera fecha, Deportes Puerto Montt y Santiago Morning jugaron su duelo sólo con el árbitro central, pues de manera insólita no llegaron ni los guardalíneas ni el cuarto referee. Ni hablar del partido entre Deportes Temuco y Ñublense que de frentón no se pudo jugar por ausencia del cuarteto referil en su conjunto.

Por si fuese poco, Santiago Wanderers perdió los puntos luego de no contar con ambulancia para su encuentro con Deportes Melipilla y el cruce entre Unión Española y Magallanes fue suspendido por no haber suficiente cantidad de jugadoras debidamente inscritas. "Las problemáticas (...) solo demuestran el nivel de improvisación con el que se trabaja", dicen desde la Asociación femenil. Pero esto va más allá de la "improvisación" por parte del ente rector del balompié profesional, es derechamente desidia para con el fútbol femenino.

Con la implementación de la ley que busca profesionalizar la actividad, los dirigentes buscaron acortar la duración del campeonato femenino sólo con el objetivo de pagar menos sueldos, y para los dirigentes la matemática es simple, el fútbol femenino lo ven como un gasto que no les va a generar ganancia futura. Con esa visión, estos mismos dirigentes no tendrán ningún derecho de subirse al carro de la victoria si algún equipo o seleccionado femenino logre algún título internacional, a pesar de los obstáculos que están poniendo con su desidia.