Francisco Reyes protagoniza la nueva película de Gustavo Graef Marino
ESTRENO. Un cineasta establece una relación "con fecha de expiración" con una mujer menor, mientras intenta encontrarse.
Amelia Carvallo
El más reciente drama del cineasta ganador del Premio Goya Gustavo Graef Marino ("Johnny cien pesos") se titula "El vacío", dura 97 minutos y es protagonizado por Francisco Reyes y Javiera Díaz de Valdés, quienes muestran el vía crucis de un director de cine que no ha vuelto a dirigir con éxito, que se emparejó con una mujer mucho menor y naufraga en la soledad del departamento de su moribunda madre.
A Reyes, como a muchos, el nombre de Graef Marino le comenzó a sonar a comienzos de los 90, adosado a su trepidante filme "Johnny cien pesos", basado en un asalto real ocurrido en el centro de Santiago.
Luego, en el ambiente del cine nacional, se hicieron amigos y lo continuaron siendo cuando Graef Marino se fue a vivir a Estados Unidos e hizo filmes para Hollywood. "En 2002 Gustavo me contó que se iba a filmar a Rumania y yo le dije: "Invita" (risas). Me ofreció un pequeño rol, un bolo como se le llama, en esta película y viajé a Europa del Este, donde estuve como tres semanas en plan aventura", recuerda, y resalta que a pesar de haber caído hace poco la Cortina de Hierro, la infraestructura para las artes no era poca, y que incluso contaban con una ciudadela llamada Castel Film.
Sobre "El vacío", el actor califica la filmación y todo el proyecto como "meteórico", aludiendo a la velocidad que le imprimió Graef Marino al guión y al rodaje de este filme intimista y con algo de suspenso. "Mi personaje siempre está colgando de un hilo y creo que a Gustavo le hacía falta como director entrar en un espacio que tuviera que ver con el mundo interior y las profundidades de un ser".
Escribió el guión contigo en la cabeza como personaje principal.
-Nos conocemos hace 20 años y para Gustavo llegó el momento en que quiere contar esta historia y conectamos de manera bien orgánica, tenemos como la misma edad. Igual que me dijera que escribió pensando en mí puede ser un arma de doble filo (risas) pero fue muy difícil negarme, además que me quedó claro que era súper importante para él hacer esta película, había mucha urgencia de parte de él, una urgencia existencial, como que la vida lo empujó a hacerla, fue un vómito existencial, creo.
Buena atmósfera
Filmada en diciembre de 2021, ocuparon un equipo reducido de actores y técnicos, lo que benefició a la película en buscar intimidad para mostrar esta historia de amor que naufraga.
"El espacio de confianza y de identidad que existió, de silencio y respeto que hubo fue nuestra base, estábamos todos metidos en ese pequeño universo. La buena relación que uno puede establecer con sus compañeros, sobre todo si no los conoce y no han trabajado nunca, esa impronta la pone siempre el director y su estilo de trabajo. Fue una atmósfera de trabajo bien rica, me recordó lo de Sebastián Lelio y 'Una mujer fantástica', él también ponía esas conexiones con una cámara que se tomaba su tiempo", dijo el actor.
Uno de los temas de la película es el talento desperdiciado. ¿Qué reflexionaste sobre eso?
-Creo que la conexión con uno mismo es fundamental en la vida, a veces nos dejamos llevar por lo externo y empezamos a vivir vidas prestadas. En este caso, la forma en la que trata de llevar adelante su vida es totalmente equivocada, en esta película lo espiritual casi no existe, todo se resuelve a través de lo material, fórmulas externas para conseguir el amor y la compañía. Creo que eso conduce a la destrucción y la angustia que es la muerte en vida.
¿Comenzar una relación con "fecha de expiración" como dice él?
-La soledad no es buena consejera y cuando uno reacciona desde ella seguramente elige mal. Buscar compañía ansiosamente, porque necesitas a alguien a tu lado, no creo que sea lo correcto. Es mejor encontrarse con uno mismo, esa es la mejor compañía.
Otra ficción para la pantalla grande que protagonizó hace poco Pancho Reyes es "Martínez", ópera prima de la mexicana Lorena Padilla, grabada en Guadalajara: "Lorena llegó a mí por 'Una mujer fantástica', vio el trailer y le pareció que yo podía dar cuenta de su protagonista que es un hombre muy solitario, un chileno radicado en México hace más de 30 años, que trabaja en la administración pública mexicana y tiene una forma de ser muy rígida que da un vuelco cuando su vecina muere, y él se hace cargo de los objetos de esta mujer que llevó una vida muy rica afectivamente. Martínez, el oscuro funcionario, empieza a renacer de la mano de una mujer muerta".