A tres años del primer caso de covid
Un 14 de marzo de 2020 un hombre que viajó a Estados Unidos con su familia se convirtió en el primer contagiado oficial en Atacama. ¿Qué aprendimos? ¿será necesaria mantener la Alerta Sanitaria? Queda la duda si hubo una sobrerreacción en ciertos ámbitos, empujados por el populismo de autoridades que buscaban convertirse héroes o ganar más votos, pero al menos en líneas generales la declaración de cuarentenas y otras medidas se hicieron en una justa medida.
Han pasado tres años desde el primer caso de covid-19 que se registró en Atacama y los recuerdos de aquello llegan a la comunidad como un proceso lleno de incertidumbre e inevitable a la vez, en el que los contagios serían un tema diario y con olas como las que ocurrieron en Europa. A partir de esto, siempre es bueno hacer un balance y hacernos preguntas como ¿hemos aprendido a convivir con el virus? ¿qué se hizo bien? ¿qué se hizo mal? ¿estamos preparados para otra pandemia?
Después de la batalla, todos son generales pero si hay algo que debemos tener en cuenta que en toda pandemia son los científicos los que deben llevar "el pandero" en las decisiones que se vayan tomando. En aquella ocasión se generó una alarma que ahora se podría calificar como innecesaria, con las peticiones de cerrar comunas y la región de Atacama, como también de proyecciones que no tenían sustento estadístico.
Por ese entonces, el Gobierno de Alemania fue el más acertado con el dato: entre el 60% y 70% de la población se contagiaría de coronavirus y lo que se debía hacer era ralentizar la expansión del virus.
Es muy probable que el promedio actual de contagiados a nivel mundial ronde esas cifras, pero lo que ha logrado detener la catástrofe sanitaria son las vacunas.
Justamente allí podríamos decir que Chile logró estándares muy adecuados, aunque ciertamente en los últimos meses eso se ha perdido ya sea por gestión del Ministerio de Salud o porque derechamente la población ya no tiene el mismo ímpetu que había en un comienzo.
Queda la duda si hubo una sobrerreacción en ciertos ámbitos, empujados por el populismo de autoridades que buscaban convertirse héroes o ganar más votos, pero al menos en líneas generales la declaración de cuarentenas y otras medidas se hicieron en una justa medida a diferencia de otros países, que abusaron de los confinamientos en una errada estrategia llamada "cero covid" que nunca iba a ser cero, u otros países que prácticamente no los utilizaron como parte de una normalidad que pudo traer consecuencias nefastas para la gestión hospitalaria.