Recuerdan 19 años del fallecimiento de monseñor Ariztía
MISA. Monseñor Ricardo Morales habló del legado del religioso.
El pasado viernes se realizó una misa en la Catedral en memoria de monseñor Fernando Ariztía, recordado obispo emérito de Copiapó, esto al cumplirse 19 años de su fallecimiento. La liturgia fue presidida por el obispo, monseñor Ricardo Morales, junto a sacerdotes y diáconos. En su homilía, el obispo dijo que "la presencia de don Fernando fue brote de esperanza, cuando en Chile existía una cultura de muerte; cuando el mal parecía tener la última palabra, el Señor fue capaz de suscitar hombres y mujeres como don Fernando, que fueron brotes de esperanza, esto llenó a mucha gente de consuelo, levantó corazones desesperanzados". Mencionó que "fue el brote verde que en medio del invierno anuncia que hay vida" y recordó las palabras del Papa Francisco en su Carta al Pueblo de Dios que peregrina en Chile, que dice que la Iglesia debe crecer en profetismo: "Hombres como don Fernando nos muestran que, si la Iglesia no es profética, no es Iglesia". Pidió no esperar ese profetismo "solo de los pastores, toda la Iglesia debe ser profética, anuncia y denunciar, no tener miedo, levantar la cabeza, porque Cristo vence sobre toda muerte y todo pecado" y concluyó que "con esa certeza en el corazón sepamos construir una Iglesia fundada en la esperanza de Cristo".