Redacción
A comienzos de este año un asalto al local de comida Doggis había causado impacto en la comunidad copiapina, dado que se había tratado de un robo con intimidación que afectaba a trabajadores del recinto.
Diez meses después se conoció la condena y según informó la Fiscalía, cumplirán una pena de 15 años de cárcel, esto tras un Juicio Oral en el que el fiscal adjunto Sebastián Coya González pudo acreditar que el día 27 de enero los acusados Luis Garcés Colorado, Javier Cabeza Riasco y Jhon Viveros Paredes se concertaron para concurrir al recinto ubicado en el centro de Copiapó con fines delictuales, acción que concretaron alrededor de las 22:20 horas portando un arma de fuego y armas a fogueo.
El Ministerio Público demostró que los tres imputados intimidaron a los trabajadores del lugar y a repartidores de la aplicación "Pedidos Ya" que se encontraban en el local a la hora del asalto, logrando sustraer especies personales de las víctimas y dinero en efectivo para luego darse a la fuga.
Delito que fue oportunamente denunciado a personal de Carabineros, quienes realizaron patrullajes por el sector céntrico advirtiendo la presencia de los sospechosos en calle Atacama a la altura del número 74 y procedieron a fiscalizarlos.
De acuerdo a los antecedentes de esta investigación, en ese instante Viveros Paredes apuntó con el arma de fuego a un funcionario policial, originándose una persecución que culminó minutos más tardes con la detención de todos los involucrados y con la incautación del arma convencional y otras dos a fogueo, además de recuperar parte del dinero sustraído y las especies de las personas afectadas.
En enero se informó que los detenidos eran de nacionalidad colombiana y estaban de forma irregular en el país.
Sentencia
En el juicio la Fiscalía presentó diversos medios de prueba y peritajes contenidos en la carpeta investigativa de este caso, material probatorio con la que se obtuvo la condena de los tres involucrados por su participación consumada en el delito de robo con intimidación. Ilícito por el que cada uno de ellos deberá cumplir la pena efectiva de 15 años de cárcel, mientras que el condenado que portaba el arma de fuego fue sentenciado, además, a 4 años de presidio.