Centenario del terremoto y maremoto año 1922

Señor director: Con motivo de conmemorarse los días 10 y 11 de noviembre el Centenario del terremoto y maremoto ocurrido el año 1922, quiero destacar la labor de los periodistas y los historiadores que se han encargado de entregarnos información en relación a los trágicos acontecimientos que ocurrieron en la zona Norte de Chile y de manera especial en esta región en aquella fecha tan triste de nuestra historia.

En el libro "Terremoto y Maremoto en el Norte de Chile" del profesor, escritor e historiador Omar Monroy López (segunda edición año 2018), se da a conocer en forma extensa la verdadera catástrofe que ocasionó esté trágico acontecimiento, las ciudades ubicadas lejos de la costa sintieron como el fuerte movimiento fue agrietando la tierra, destruyendo casas, edificios y aniquilando la vida de niños, jóvenes, adultos y ancianos.

Las ciudades de la costa fueron abatidas por gigantescas olas que destruyeron casas, muelles, empresas, ferrocarriles, fundiciones, barcos que con la fuerza del mar ingresaron a la ciudad para posteriormente ser nuevamente arrastrados a las turbulentas aguas…el océano también se llevó la vida de muchas personas.

El trabajo de los periodistas de antaño permitió tener un registro de los hechos acaecidos, entregaron información no sólo para ese momento , su trabajo le ha permitido acceder a fuentes de investigación a muchos historiadores que con su labor nos permiten poder acceder a esos momentos en que la naturaleza con toda su fuerza avasalló con puertos y ciudades.

Fuente importante de información han sido también los testimonios de sobrevivientes del terremoto y maremoto, ellos y ellas a través de sus relatos narran los aterradores momentos que les tocó vivir, varios testimonios aparecen en el libro de don Omar Monroy López, el autor también menciona como fuente de información al Diario Atacama, suplemento especial del 8 de Diciembre de 1988, suplemento aniversario de Copiapó 8 de diciembre de 1993.

Cada testimonio generalmente hacía aflorar lágrimas en el narrador (a), aunque habían pasado muchos años del terremoto y maremoto al recordarlo lo revivían y al evocarlo volvían a experimentar la angustia, pánico e incertidumbre en medio de la oscuridad sacudida por gigantescos movimientos de la tierra y un aterrador sonido del mar…mientras corrían para salvarse.

Ya no quedan sobrevivientes de aquellos acontecimientos ellos y ellas en sus vidas jamás olvidaron lo acaecido los días 10 y 11 de noviembre del año 1922.

Que este centenario nos recuerde estar preparados para estos tristes acontecimientos que cada cierto tiempo nos asolan, no podemos evitarlos o predecirlos pero podemos tomar las precauciones para protegernos e impedir que los daños sean inconmensurables y por sobre todo cuidar lo más valioso que tenemos…la vida.

"Nunca en mi vida he visto una ruina igual": Presidente Arturo Alessandri Palma refiriéndose a Chañaral.

Miguel Angel Aguirre, Chañaral

Hélder Cámara

A raíz de las tensiones vividas en Brasil, antes y después de ser electo presidente, Lula da Silva, recordé al ex arzobispo de ese país, Hélder Cámara, fallecido en 1999, a los 90 años. Él, durante la dictadura militar de Brasil (1964-1985) inició un movimiento de presión moral, para llamar la atención por las condiciones de miseria en que vivían miles de brasileños. Predicó una fe cristiana comprometida con los pobres y necesitados. Se convirtió en líder de los derechos humanos y acudió a los medios de comunicación para denunciar las injusticias; pero, después le prohibieron el acceso a estos medios, incluso que se hablara de él. Por su actuación y compromiso en lo social, fue perseguido por los militares y llamado "arzobispo rojo". En 1968 su residencia fue ametrallada y un año después asesinaron a uno de sus colaboradores más cercanos. Por su solidaridad con los perseguidos y oprimidos, recibió varios premios nacionales e internacionales; fue el único brasileño candidato cuatro veces al "Premio Nobel de la Paz".

Derico Cofré

Niñez y delincuencia

El reporte del Departamento de Análisis Criminal de Carabineros establece que, a junio de este año, se registran 25.591 detenidos por robo con violencia en el país, de los cuales 3.155 son niños, niñas y adolescentes (NNA). Un triste récord que nos debe movilizar como país no solo a la reflexión, sino que a actuar para ponerle coto a la participación de NNA en delitos de alta connotación pública.La delincuencia juvenil no es un fenómeno reciente, pero sí se observa una participación de menores de edad en delitos más violentos, lo que, a juicio de expertos, obedecería al "secuestro" de NNA por bandas de narcotraficantes o asociadas al crimen organizado.

Para prevenir eficazmente este fenómeno es urgente que la sociedad en su conjunto procure un desarrollo armonioso de los niños y adolescentes, y respete y cultive su personalidad basada en valores universales a partir de la primera infancia. Pero también se debe avanzar en la formulación de doctrinas y criterios especializados para la prevención de la delincuencia juvenil, considerando las leyes, los procesos, las instituciones, las instalaciones y una red de servicios. Es evidente que la oferta pública no ha sido capaz de interrumpir la reiteración de las conductas antisociales de NNA. Tal y como establece la evidencia empírica, un alto porcentaje de menores de edad involucrados en trayectorias delictivas desisten de ella en la medida que se reintegran al sistema educativo formal o vuelven a vivir bajo el alero de familias con modelos prosociales.

Harry Grayde K. director ejecutivo de World Vision

Comité técnico de admisibilidad

A fin de dar cauce a un innecesario e incierto nuevo proceso constituyente dirigentes de diversas colectividades políticas acordaron que será un "comité técnico de admisibilidad" compuesto por catorce juristas especializados en estudios constitucionales, nombrados por el Congreso, el que deberá velar por el cumplimiento de las bases constitucionales establecidas previamente. Considerando la enorme dificultad que para una convención multitudinaria entraña la redacción del texto de una Carta Fundamental que resulte razonable y armonioso, lo más lógico sería que dicho "comité técnico" nombrado por el Congreso sea el encargado de redactar el proyecto de nueva Constitución; proyecto que debería ser revisado, corregido y aprobado por el Congreso y luego ser sometido a un plebiscito nacional ratificatorio.

Adolfo Paúl Latorre, abogado y magíster en ciencia política