Vanessa Carrasco

Ambas propuestas (Apruebo y Rechazo), realizaron sus respectivos cierre de campañas en todo el territorio nacional. La suerte "ya está echada" dirían algunos, y solo es cosa de tiempo para conocer cuál será la opción que regirá a Chile desde el domingo 4 de septiembre hacia adelante.

Un momento histórico, en el que la opinión de expertos, a horas previas del plebiscito, es más que necesaria para conocer el escenario sociopolítico de la ciudadanía.

Este medio,consultó al analista político Guillermo Holzmann, de Chile Transparente, magíster en ciencias políticas y académico renombrado de diversas casas de estudio superior en Chile; también al historiador, académico y escritor Alberto Cecereu junto a la psicóloga comunitaria, profesora universitaria y doctora en intervención social Sara Arenas.

Quisimos inicialmente saber si los actos de cierre de campañas afectan la decisión de los más indecisos en la recta final. Para Holzmann "los cierres de campaña tienen un sentido simbólico y normalmente no generan en la práctica un cambio en el comportamiento electoral, particularmente porque ese comportamiento electoral ya para muchos está definido y para aquellos que lo van a definir en las últimas 24 horas, el cierre de campaña no lo interpretan como un elemento que vaya a definir sus posiciones, puesto que están en una suerte de reflexión interna en la cual definen".

Un punto contrastante planteó Cecereu, para quien las campañas políticas y los cierres de campaña en particular "son siempre, más que una campaña de contenidos, una campaña de emociones y por lo tanto los distintos cierres de campaña o manifestaciones masivas de campaña, como por ejemplo lo que realizó el Comando del Apruebo con los denominados "Apruebazos", sí mueven a la población y al electorado porque apelan a una emoción. No es baladí que Quilapayún e Inti Illimani hayan tocado en el cierre de campaña en Santiago centro, el pueblo unido jamás será vencido y haya sido coreado por todas las personas, ustedes podrán decir que es un público cautivo, sí es verdad, pero mediáticamente genera algo que es sobre la emocionalidad".

Para Holzmann en cambio "el grupo de personas que llaman indecisos, que yo llamo desideologizados, están más bien esperando alguna reflexión propia o interna de su círculo más cercano y van a tomar la decisión el mismo día domingo, por lo tanto, diría que los cierres de campaña no son significativos, salvo para aquellos que ya tomaron una postura frente a la decisión"

Para la académica Sara Arenas, las campañas y en particular los cierres de éstas "estuvieron muy marcados por un ánimo distintivo, en el caso de las actividades a lo largo de Chile del Apruebo pudo observarse mucha alegría, colores, armonización en donde se trató de evidenciar la mancomunión y la alegría, mediante actividades abiertas y convocantes. En las actividades del Rechazo se pudo observar otra actitud en la que hubo mucha presencia de banderas y se realizaron de forma más cerrada, por supuesto que estos son símbolos claros para la ciudadanía sobre una opción u otra, aunque siempre lo definitivo es el día de la elección en las urnas".

A pesar de estas interpretaciones, Cecereu enfatiza respecto a lo difícil que es proyectar resultados dada la obligatoriedad del voto, indicando que "no sabemos qué va a pasar con estas personas que jamás han votado y que siempre se han restado. Se puede aplicar una predicción sólo si se