EE.UU. se dotará de 28 satélites frente a los misiles hipersónicos rusos y chinos
DEFENSA. En el Pentágono buscan tener un sistema de advertencia y seguimiento de última generación, invirtiendo 1.300 millones de dólares.
Estados Unidos se adjudicó dos contratos por 1.300 millones de dólares para dotarse de 28 satélites para defenderse de las amenazas en el espacio provenientes de misiles sofisticados, como los hipersónicos, de China y Rusia.
El director de la Agencia de Desarrollo Espacial de EE.UU., Derek Tournear, anunció en el Pentágono que forma parte del primer tramo de un proyecto para tener un sistema de advertencia y seguimiento de misiles de última generación.
Los contratos fueron adjudicados a las empresas estadounidenses L3Harris Technologies y Nortrop Grumman, que desarrollarán cuatro aviones con 28 satélites, que esperan que sean lanzados en abril de 2025.
Tournear detalló que los satélites, que dispondrán de tecnología de infrarrojo, estarán diseñados específicamente para seguir lanzamientos de misiles y proyectiles hipersónicos, frente a los que hasta ahora EE.UU. no contaba con un sistema de detección.
"Es importante porque como habrán visto en las noticias, nuestros adversarios, principalmente Rusia y China, desarrollaron y probaron artefactos voladores hipersónicos", dijo Tournear, que explicó que ese tipo de misiles tiene alta capacidad de maniobrar, no como los tradicionales.
Antes, EE.UU. utilizaba satélites de detección, que eran más caros, tardaban entre 10 y 15 años en ser construidos y tenían una esperanza de vida de 15 o más años, pero ahora el país está centrado en "diseñar una arquitectura espacial más resiliente, basada en la proliferación".
El objetivo es crear una mecanismo de advertencia y seguimiento de misiles con primer nivel de protección que contará con una constelación de satélites -más asequibles y menos duraderos- que volarán a unos 1.000 kilómetros de altura, y un segundo, con artefactos a 20.000 kilómetros de la superficie.
Tournear subrayó el reto que plantean en la actualidad los misiles hipersónicos, difíciles de detectar por su velocidad y con capacidad de maniobrar, por lo que es complicado predecir su trayectoria, algo que no ocurría en el pasado.
Los nuevos 28 satélites volarán a unos 1.000 kilómetros de la Tierra y tendrá órbitas polares, es decir, que se moverán de norte a sur y viceversa. Deberían durar cinco años.
Tournear anticipó que tras el lanzamiento de esos 28 artefactos se pondrán en órbita otros 54 en el tramo dos de este programa, y así hasta ir creciendo.