Un llamado a que la región tenga un sistema de gestión de residuos realizó la agrupación Blue Free, organización que nace a fines de 2018 tras observar la suciedad que queda en las playas, específicamente en Bahía Salada, la cual comenzó a saturarse de basura de manera desproporcionada. Inicialmente, un grupo de amigos y familiares, que habitualmente visitaba este lugar, decidió organizar una intervención de limpieza.

Actualmente, desde Blue Free miran con preocupación la gestión de la basura a nivel regional y el poco avance que existe en torno al reciclaje, la disminución de generación de basura o incluso la ubicación de los vertederos. De hecho, frente a la playa de Bahía Salada, se realizó la instalación de dos vertederos, que a juicio de la entidad representan un alto riesgo de ser arrastrados hacia el mar en caso de marejada, puesto que se encuentran a unos 20 metros de la orilla.

Esta medida, es cuestionada por la agrupación porque ha generado la acumulación de prácticamente el triple de basura que se registraba en el lugar antes de la existencia de los vertederos; además del riesgo de que los residuos sean arrastrados al mar.

Para la organización, lo que urge en la región es un sistema de gestión de residuos y avanzar en la dirección de una cultura de reciclaje, reutilización y disminución más que seguir instalando vertederos o basureros. Actualmente no pueden recibir dineros, porque no son una agrupación formal, pero sí reciben materiales como palas o a quienes se quieran sumar con sus vehículos.

Con el tiempo y el crecimiento de la organización, descartaron transformarse en una ONG, pues -según dicen- podrían ganar proyectos del gobierno de turno y perder la magia que tiene la propia iniciativa junto a la capacidad de organización de un grupo de personas que dice tener como interés común el cuidado del medioambiente.