Vecinos del centro histórico reclaman por ruidos de terrazas de locales nocturnos y basura
COPIAPÓ. Acusan que incluso los guardias de estos locales "tienen una actitud matonesca". Carabineros dice que cifras de delitos bajaron.
Vanessa Carrasco
Para muchos el fin del estado excepción fue un alivio y una gran noticia, sin embargo, para los vecinos del barrio Alameda el fin de las restricciones ha sido una pesadilla. Lo anterior debido al funcionamiento de locales nocturnos hasta altas horas de la noche, los cuales debido a los protocolos COVID-19, han debido operar al aire libre, en las denominadas terrazas, con lo que, según los vecinos, el ruido se hace mucho más evidente interrumpiendo su sueño normal.
Según relatan los vecinos, uno de los inconvenientes más graves es que al instalar sus mesas y parlantes en las terrazas, sólo cubiertos con carpas, no consideran que el ruido escapa a todas las casas vecinas del sector, en donde como cualquier familia, hay niños y adultos mayores.
"Yo obligadamente tengo que vivir encerrada, porque orinan mi puerta, fuman marihuana, sacan autos a alta velocidad, el drama más grande lo vivimos cuando estos locales cierran, aunque en el interior siguen funcionando… Si uno sale, lo único que gana es un par de garabatos. Esto es muy ingrato vivirlo como adulto mayor, para dormir tengo que usar tapones", relata una desesperada vecina que cuenta que lleva años yendo al municipio a reclamar y que cuenta que ahora al finalizar el estado de excepción, lo que se había calmado solamente fue un paréntesis en sus vidas, dado que volvió a transformarse en un verdadero martirio.
Más testimonios
Otra vecina del sector, agrega también -pidiendo mantener el anonimato- que incluso los guardias de estos locales "tienen una actitud matonesca, parece una mafia. Nuestras veredas son estacionamiento de cualquiera, querer sacar el auto por una urgencia en la noche es un imposible y lo más grave es que al amanecer, nos encontramos con basura en cantidades industriales en un barrio que es residencial".
De hecho, según pudimos constatar, los contenedores del sector efectivamente se encuentran sobrepasados de basura, atribuible a los locales del sector. "Botan las botellas con restos de alcohol, cajas que ni siquiera están aplastadas o separadas de la demás basura, restos enormes de comida, en la mañana el hedor es insoportable y además es deprimente ver las calles así de sucias", sostiene una vecina.
Varias de ellas de hecho, mencionan a dos locales como los principales focos de conflicto del sector, principalmente porque después del horario de cierre siguen funcionando, aunque no saben determinar si son los propios trabajadores en labores de aseo o bien funcionan de forma clandestina.
Ambos locales mencionados no pertenecen a la agrupación Barrio Alameda, cuyos propietarios se reúnen para ver este tipo de temas, a pesar de haber sido invitados varias veces a participar en las reuniones de la agrupación, de acuerdo a lo que mencionan.
Otros vecinos y locatarios del sector confirmaron a este medio que uno de los locales en cuestión tiene desde hace tiempo el problema de vehículos que se estacionan en la vereda, de ruidos molestos y de mal uso de los contenedores de basura, algunos relacionan este problema en parte al grupo etario al que está dirigido el local, el cual sería frecuentado por personas menores de 30 años.
Carabineros
Carabineros de la Segunda Comisaria de Copiapó, indicó a este medio que las cifras de delitos en el sector mencionado han disminuido abruptamente entre 2021 y 2020. De hecho, entre robos con violencia, intimidación, sorpresa, robo de vehículos, delitos de lesiones y hurtos, en lo que va de 2021 se ha registrado un 45% menos de delitos que en el año anterior.
Finalmente, el único delito que registró un aumento del 67% fue el robo en lugar no habitado, le cual-a primer análisis- no es asociable a la presencia de los locales nocturnos en el sector. Según el capitán de Carabineros, Yerko Díaz, se realizan análisis permanentes respecto de las cifras delictuales y "por lo que quiero entregar tranquilidad a los vecinos del sector, que registra una disminución del 45% de los delitos, exceptuando el robo en lugar no habitado, que corresponde a múltiples factores, que muchas veces obedece a la oportunidad". Agregando además que "me quiero comprometer a seguir trabajando y efectuando servicios de focalización para disminuir la sensación de inseguridad que pueda afectar a los vecinos".