Biden compromete ayuda tras devastación de Ida en Louisiana
EE.UU. Paso del huracán dejó desolador panorama y, por ahora, un fallecido.
Este lunes comenzaron las labores de rescate y evaluación del paso del huracán Ida, que dejó un saldo de devastación y al menos un fallecido en Lousiana, EE.UU., con un escenario de desolación y el corte del suministro eléctrico que hasta el cierre de esta edición afectaba a más de un millón de clientes y a toda la ciudad de Nueva Orleans.
El presidente Joe Biden, dijo ayer que Ida causó "daños masivos" y anunció que unos 5.000 miembros de la Guardia Nacional se desplazaron a la zona impactada, además de apoyos estatales para rescate y reparación de infraestructura dañada por Ida.
Además, agregó que probablemente el número de víctimas fatales tras el paso de uno de los más potentes huracanes que ha tocado tierra en el país, aumente, lo que fue confirmado por el gobernador de Louisiana, John Bel Edwards, quien aseguró que las muertes pueden subir "considerablemente" y que el impacto "catastrófico" del ciclón supone una recuperación a largo plazo.
Las imágenes tras el paso del huracán muestran personas en botes recorriendo calles inundadas, árboles arrancados de raíz, tendidos eléctricos caídos, destrucción en viviendas, oficinas y hospitales, cierre de autopistas y desplazamientos de tierra.
Ida se convirtió en una tormenta tropical, con vientos de hasta 65 kilómetros por hora y continúa su recorrido destructivo hacia el norte de Estados Unidos, después de tocar tierra el domingo y provocar importantes daños.
Pese a su degradación, Ida aún supone graves riesgos de tornados, vientos destructivos e inundaciones, ya sea por las fuertes lluvias o también por la marejada ciclónica, que amenaza incluso las zonas costeras de Alabama y el noroeste de Florida, según las predicciones del Centro Nacional de Huracanes (NHC).
La agencia advirtió además que las áreas impactadas incluirán hasta mediados de la semana la costa sur estadounidense, el valle de Tennessee, y el noroeste del país.