Alberto Abarza hizo historia para Chile: oro paralímpico
TOKIO 2020. "Me siento viviendo un sueño", dijo el nadador nacional, que ganó la final de los 100 metros espalda y sumó la primera presea para el país.
Redacción
El nadador Alberto Abarza se inscribió en la historia del deportes chileno al conseguir ayer la medalla de oro en la competencia de 100 metros espalda en los Juegos Paralímpicos de Tokio. Con esto se convirtió en el segundo atleta nacional en obtener un título en estas competencias tras la gesta del atleta Cristián Valenzuela en Londres 2012.
Abarza fue el primer deportista nacional en competir en este certamen y de inmediato metió a nuestro país en el medallero. Tras ganar su carrera clasificatoria durante la noche chilena, ayer en la madrugada disputó la final, en la que superó a los representantes de Brasil y Rusia, ganadores de las preseas de plata y bronce en la final.
"Me siento viviendo un sueño que partió cuando tenía dos años cuando ingresé a la piscina de la Teletón. Coronarlo así con el apoyo de todo Chile, de mi familia. Estoy muy feliz", dijo el campeón tras su triunfo a las redes sociales del Comité Paralímpico de Chile, organismo que acompaña a los deportistas en la justa de Japón.
Su carrera ha sido tan difícil como puede imaginarse para un hombre que desde pequeño enfrenta el mal de Charcot-Marie-Tooth, una enfermedad degenerativa que atrofia los músculos de manera progresiva hasta dejarlos sin fuerzas incluso para mantenerse en pie, por lo que él vive postrado y se moviliza con la ayuda de una silla de ruedas.
Pura alegría
Ayer todo eso quedó olvidado. "Me dolió muchísimo. Sabía que tenía que apretar y no volverme loco los primeros metros. Es difícil enfocarse porque uno cree que va lento, pero los primeros 15 metros iba rápido y a la vuelta me dolió como nunca", relató ya con su presea en la mano.
"Siempre soñé con cantar el himno y para cantarlo había que ganar la medalla", añadió con una gran sonrisa.
"Me hubiera gustado que mis hijas estuvieran acá, mi pareja, mi mamá que ella era la que me llevaba a la piscina cuando era niño y me inculcó el amor por el deporte. Estoy con mi hermana que también me acompañaba a nadar cuando niño. Es un camino largo de muchos años. No es llegar y estar en unos juegos. Es mucho sacrificio, todos los días a las cinco de la mañana meterse al agua helada, pero valió la pena y eso es lo más lindo que rescato de esto", comentó el campeón olímpico.
"Lo que les digo a todos es que los sueños están para cumplirse. Con trabajo se puede lograr cualquier cosa, hasta lo imposible. Es proponérselo. Nada es imposible", cerró Abarza, aún emocionado por su triunfo histórico.
Gracias a su gran esfuerzo, incluso pagando por su cuenta muchos de sus gastos por falta de apoyo, el nadador se convertirá en el deportista chileno que recibirá el mayor aporte estatal. La medalla de oro lo convirtió en beneficiario de la beca Proddar que estipula una suma mensual de casi tres millones de pesos durante tres años ($ 2.998.717). Además, recibirá un premio de 800 UTM, equivalentes a 41 millones de pesos al valor de agosto.
2 medallas de oro tiene Chile en la historia de los Paralímpicos. La primera fue de Cristián Valenzuela.
41 millones de pesos recibirá como premio el campeón por su triunfo, lo que se sumará a un aporte mensual.