Gobernadores y descentralización del conocimiento
La ley 21.074 para el fortalecimiento de la regionalización en Chile definió que son competencias de los gobiernos regionales la promoción de la investigación científica y tecnológica, fomentar el desarrollo de la educación superior y de enseñanza media técnico profesional en la región y la elaboración de la Política Regional de Ciencia, Tecnología e Innovación. La nueva figura del gobernador ¿cómo dialogará con la institucionalidad existente? ¿Serán un instrumento efectivo para la descentralización de las capacidades científicas?
Chile es un país territorialmente complejo, con regiones muchas veces más grandes que algunos países europeos o centroamericanos, que empezó hace ya un tiempo, a identificar unidades subregionales que dan cuenta de realidades específicas en la dimensión física, social, productiva y cultural. Ya un informe de CONICYT -hoy ANID- hacia el 2006 presentaba un completo panorama de esta diversidad y riqueza local.
En esta lógica el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación creó 5 SEREMI de alcance macrozonal, las que dan cuenta de las particularidades y potencialidades territoriales. Se puede observar así cierta zonificación en los temas y una fuerte vocación a generar capacidades con foco en problemas de interés local. Los contextos geográficos y las actividades económicas cobran relevancia y la investigación tiende a concentrarse en temas vinculados a las actividades productivas regionales.
Investigación en las macrozonas ha ido aumentando, pero persisten los altos niveles de centralización. Según el Ranking SIR Iber 2021 de SCImago la región Metropolitana concentra más del 60% de las investigaciones publicadas en revistas científicas en el quinquenio 2015-2019 en Chile y el 57% de las instituciones de educación superior (IES). Valparaíso continúa como la segunda región del país, con el 15% de la producción y el 9% de las IES, seguida del Biobío con el 14% de la producción y 8% de las IES.
La descentralización de la ciencia es un tema relevante a la hora de proyectarnos al futuro. Claramente es distinto hacer investigación en regiones que hacerlo en la Metropolitana. Necesitamos políticas de acción afirmativa para nuestras regiones, que estimulen los ecosistemas locales y hagan atractiva la inserción de investigadoras e investigadores en las instituciones con presencia regional, en los centros de investigación, en el sector productivo y en el aparato público local. La ciencia no puede seguir siendo tema de unos pocos, Santiago no es Chile y está latente el riesgo en la dependencia de recursos desde el nivel central. La nueva autoridad regional tendrá la misión de fomento y articulación del ecosistema del conocimiento local, construido a partir de las necesidades, capacidades y estrategias locales.
Dr. Iván Suazo, vicerrector de Investigación y Doctorados U. Autónoma
Mipymes: la importancia del diagnóstico
Sr. Director: Actualmente en Chile no es posible saber con objetividad cuál es el porcentaje de representación y las características internas que sostienen a las Mipymes. Esto se debe fundamentalmente a la informalidad que transversaliza su desarrollo, tanto a nivel de estructura organizacional -manifestado en las limitantes de acceso al crédito de banca formal-; así como de la iniciación de actividades, por ejemplo.
La cuestión entonces es ¿cómo saber con precisión hacia donde se debe inyectar la liquidez financiera si no tenemos un escenario claro en torno a las características que dichas acciones deben poseer?
Como sabemos, es clave diagnosticar y con ello elaborar de manera sistemática las necesidades, identificando dolores, pero también particularidades relevantes de funcionamiento, oportunidades y fortalezas. Un desafío que no solo compete al orden de lo metodológico, sino también al orden de lo fundacional e institucional.
Es esencial que, así como la institucionalidad debe comprender la relevancia de diagnosticar de manera íntegra, articulando saberes disponibles en diversos organismos del estado (SERCOTEC, SII, entre otros), deben ser las propias Mipymes quienes deben comprender la necesidad de entregar información verídica, legitima y relevante del quehacer de la industria para. de esa forma, construir decisiones en materia de política pública que sean reflejo de los verdaderos dolores de las Mipymes. Un diagnóstico no puede ser una labor unilateral, ya que es el insumo básico para el proceso de inyección de todo tipo de recursos. ¿De qué otra manera se puede construir política publica si no es bajo el alero de la co-construccion?
Alina Muñoz Rojas, líder del Programa Más Comunidad USS