La urgencia de retomar la atención de pacientes no COVID
Los retrasos y cancelaciones en controles preventivos, diagnósticos y atención de pacientes con patologías no COVID, en el contexto de la pandemia, ha alcanzado cifras realmente preocupantes.
Al 31 de marzo, se acumulan 47.261 prestaciones GES retrasadas, con un promedio de 160,59 días. A la misma fecha, las cinco prestaciones GES con más pacientes retrasados son: Cataratas (12.546), Vicios de refracción (7.067), Salud oral integral de la embarazada (4.756), Colecistectomía preventiva (2.316) y retinopatía diabética (1.492). En tanto, Artrosis de cadera alcanzaría 1.448 casos acumulados, Órtesis 1.004 y Displasia luxante de cadera 773[1]. Más allá de las cifras, lo cierto es que la falta de controles regulares y suspensión de tratamientos y cirugías programadas puede significar un grave deterioro en la salud de los pacientes en Chile.
En este escenario, el Ministerio de Salud anunció el retorno parcial a los quirófanos, en particular en cirugía mayor ambulatoria GES, es decir, que requiera un día o menos de recuperación en el centro hospitalario, decisión que va en la línea de otorgar una solución a los pacientes en espera, ya que sabemos que el retraso en todo tipo de atención médica causa un gran deterioro en la salud general de las personas y una tremenda recarga en el Sistema de Salud en el mediano plazo.
Como asociación nos sumamos a la iniciativa Ministerio de Salud para resolver las atenciones no COVID-19 que se han ido acumulando, ya sean cirugías en lista de espera o electivas, procesos diagnósticos, tratamientos o consultas de especialidad, colaborando con tecnología médica, segura y de calidad, que permite mejorar la calidad de vida de las personas.
En una crisis sanitaria que se ha extendido más allá de lo imaginable, es fundamental que todos los actores del ecosistema de la salud tengamos un rol activo en colaborar en el retorno a las atenciones no COVID. Es por ello que para el sector de dispositivos médicos, claves en el diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de diversas patologías, es de suma urgencia que los pacientes no COVID puedan retomar cuanto antes sus controles para mejorar su bienestar y calidad de vida, y resguardar así su derecho a la salud.
Asise Fernández, presidenta de la Asociación de Dispositivos Médicos de Chile (ADIMECH)
Educación financiera para todos
Si bien la economía es una ciencia social que se usa para estudiar y explicar fenómenos económicos ocurridos en la sociedad, la podemos encontrar en cada decisión que tomamos, desde descargar una App o dedicar tiempo a una actividad, porque en todas estas acciones estamos administrando y asignando recursos que son finitos para lograr un fin. A pesar de que la economía esté en todo lo que nos rodea, por alguna razón se nos hace un tema árido y lejano.
Los resultados de la última prueba PISA revelaron que cerca de un 30% de los estudiantes chilenos no poseen las competencias mínimas requeridas en alfabetización financiera, problemática que se agudiza más en mujeres que en hombres. Si queremos bajar las tasas de endeudamiento, si queremos que las mujeres logren una mayor independencia económica y que los que hoy son niños y jóvenes puedan acceder a pensiones dignas, urge una mejor educación financiera.
Sin embargo, no se puede lograr una buena política sin un debido incentivo. Debemos dejar de ver la economía y las matemáticas como ciencias rígidas y reservadas para algunos, pues las capacidades para comprenderla y aplicarla están en todos, sin distinción. Para ello, es necesario aterrizar las temáticas a lo cotidiano y acercar a las personas de manera didáctica a dichas materias, si queremos que los frutos económicos que el mercado puede ofrecer lleguen a toda la población.
Andrea Canales, investigadora y autora del libro escolar Microeconomi-Qué? del Instituto MIPP
Otra vez, llegaron muy tarde...
Desubicados, extemporáneos, oportunistas, y todos los sinónimos que correspondan, para calificar a todos quienes (supuestamente expertos), que a estas alturas del partido, con la leche derramada, manifiestan sus preocupaciones, en relación a si los constituyentes elegidos, estarán a la altura de la gran responsabilidad que demanda la República de Chile, cuando escriban la nueva Constitución...
La reacción es tardía, ya no vale, ya no sirve, tuvieron mucho tiempo, para darse cuenta que personas solo cumpliendo los requisitos de ser chilena(o), tener cuarto medio y respirar, tal vez no eran los más idóneos para escribir la nueva Carta Magna, que regirá los destinos de las chilenas y chilenos...
No ayuda a nadie, el que ahora lloren sobre la leche derramada, ahora deberán asumir sus omisiones...
Luis Enrique Soler Milla