Australia busca crear un "súper koala" con genes que frenen su extinción
ENFERMEDADES. Los animales fueron seleccionados por sus condiciones de salud y rescatados de una zona afectada por los gigantescos incendios de 2019 y 2020.
Efe
Expertos australianos trabajan en crear un "súper koala", que no contraiga algunas enfermedades que los están matando y tenga una mayor diversidad genética, mediante el apareamiento de sementales de la zona continental con hembras que sobrevivieron a los incendios forestales de la Isla Canguro, entre 2019 y 2020.
"Los súper koalas serán aquellos que tendrán mayores oportunidades de afrontar el cambio climático, así como otras enfermedades emergentes y retos que afrontan los koalas", dijo el director ejecutivo de Koala Life, Chris Daniels, a periodistas de la Asociación de Prensa Extranjera en Australia.
En el centro de este programa están 28 koalas jóvenes rescatados de los incendios forestales del "verano negro" que afectaron a Australia entre 2019 y 2020, los que calcinaron el 50% de la Isla Canguro, 112 kilómetros al sudoeste de la ciudad de Adelaida, y que fueron trasladados al Parque de conservación Cleland, al sur de la metrópolis.
Los devastadores incendios mataron a casi el 90% de la población de 50.000 koalas que tenía Canguro, y destruyó todos los hábitats de estos marsupiales cuyo nombre significa en lengua aborigen "sin beber", en alusión a que el 90% de su hidratación proviene de las hojas de eucalipto que comen.
Enfermedades
La característica más especial de los koalas de la Isla Canguro es que ninguno de ellos sufre clamidia, enfermedad que está matando a sus parientes de la costa este de Australia, mientras que un puñado solamente ha contraído el retrovirus (KoRV), llamado el sida de esta especie.
Por esto, los 28 animales rescatados son conocidos localmente como los "niños de oro", debido a las posibilidades que tienen de salvar a la especie debido a esta peculiaridad.
La otra cara de la moneda es la poca variedad genética de los koalas de Canguro, debido en parte a la insularidad, pero sobre todo al hecho de que todos son descendientes de 18 ejemplares que fueron llevados a la isla en 1920, cuando la comercialización descontrolada de sus pieles llevó a estos marsupiales a la extinción en Australia del Sur.
En el esfuerzo por salvar a los koalas de Canguro, y potencialmente al resto de esta especie, los expertos de Australia del Sur quieren importar a un grupo de machos de zonas como las cordilleras Strzelecki, en el vecino estado de Victoria, lo cual se llevará a cabo durante las próximas semanas.
El objetivo es que los animales seleccionados se apareen en septiembre, durante la primavera en el Hemisferio Sur, con la veintena de hembras rescatadas de la isla Canguro, y produzcan alrededor de 10 crías al año.
"Serán animales de un increíble valor", comentó Daniels, en el Parque Cleland, al destacar que estos súper koalas "tendrán una mayor variedad genética y serán menos propensos a las enfermedades y condiciones genéticas" que afectan a la especie, por ejemplo en el hígado o los testículos.
Territorio calcinado
Con unas 250.000 hectáreas de terreno calcinadas en la Isla Canguro, las posibilidades de sobrevivir que tienen estos koalas son inciertas, a pesar de los esfuerzos de científicos como los del Banco de Semillas del Jardín Botánico de Adelaida, quienes intentan reintroducir algunas especies de flora nativa.
El koala, por regla general, es un animal muy delicado y especialmente sensible a cualquier cambio en el medio ambiente, ya que permanece unas 20 horas al día dormitando o descansando, y utiliza las cuatro horas restantes para alimentarse con hojas de unas pocas decenas de especies de eucaliptos.
Pasado poco tiempo desde los devastadores incendios, es "difícil saber cómo están" los koalas (Phascolarctos cinereus), que antes tenían que ser sometidos a esterilizaciones para frenar su explosión demográfica y ahora luchan por obtener el poco alimento disponible y se desconoce si tendrán "suficiente comida para alimentar a la siguiente generación", agregó el Parque de Conservación Cleland.
Esta reserva natural es uno de los pocos lugares de Australia en los cuales se puede tomar en brazos a un koala, mediante reserva previa y siempre que la temperatura ambiente no sobrepase los 32° Celsius, dando cuenta de la prolijidad con que son cuidados.
28 animales se preparan para su reproducción, lo que podría ayudar a salvar la especie tras la muerte de miles de ejemplares.