Dos ministros libaneses renuncian tras explosión
TAREAS. Ayer terminó la primera etapa de la búsqueda de sobrevivientes.
La potente explosión de Beirut cobró sus dos primeras víctimas políticas, los ministros de Información y Medio Ambiente, mientras que cinco días después del devastador suceso hay poca esperanza de encontrar supervivientes debajo de los escombros.
La ministra libanesa de Información, Manal Abdel Samad, dimitió ayer al considerar que sigue habiendo resistencia dentro del gobierno a aceptar los cambios que exige la población tras la tragedia, que dejó de momento 158 muertos y unos 6.000 heridos. "Después del horror del desastre de Beirut, presento mi dimisión del gobierno", anunció Abdel Samad en un comunicado, según la Agencia Nacional de Noticias (ANN) libanesa, seguida pocas horas después por el titular de Medio Ambiente, Damianos Kattar. En una nota, este último comunicó su dimisión "ante el horror de la catástrofe, en reverencia a las almas de las víctimas inocentes, en solidaridad con los heridos y sus familias, sintiendo el dolor de las familias de los desaparecidos, en simpatía con todos los afectados (...) y en medio de un sistema estéril y afligido". El ministro dijo que está "triste hasta la muerte" por lo ocurrido.
Mientras, en las calles de Beirut, la rabia y la indignación ciudadanas volvieron a alimentar ayer protestas violentas, cuando los manifestantes atacaron las sedes de varios ministerios y se enfrentaran con la Policía, con un saldo de 250 heridos y un agente fallecido. Mientras que las fuerzas de seguridad y los manifestantes se arrojaron gases lacrimógenos, piedras y material incendiario en los alrededores del Parlamento, en el centro de la capital libanesa.
Fin a fase de rescate
El Ejército libanés ayer dio por concluida la primera fase de las labores de búsqueda y rescate, sin que los equipos locales e internacionales hayan encontrado sobrevivientes, lo cual será menos probable a partir de este momento.
El jefe del batallón de ingeniería del ejército, Rojeh Khoury, explicó que después de tres días de búsqueda "la esperanza de encontrar a personas con vida ha disminuido", pero que continúan los trabajos para recuperar los cadáveres de debajo de los escombros. "Los equipos que buscaban gente con vida consideran que su trabajo terminó".