Demanda de CDE contra Codelco Salvador fue admitida a trámite y Rajo Inca está en el "congelador"
MINERÍA. Asegura que la empresa ha causado un daño al ecosistema único del Salar de Pedernales por la extracción de agua durante 36 años.
Fueron más de 30 años del uso indiscriminado de agua del Salar de Pedernales por parte de la División Salvador de Codelco, lo que según el Consejo de Defensa del Estado (CDE) generó un daño irremediable. Por ello, el organismo interpuso una demanda por daño ambiental en contra de Codelco División Salvador, la que fue admitida a tramitación ayer y deja en la incertidumbre la viabilidad del proyecto Rajo Inca.
El CDE establece que la empresa minera ha causado un daño al ecosistema único del Salar de Pedernales por la extracción de agua durante 36 años. Para ellos, la acción dañosa consistente en la extracción prolongada del recurso hídrico, sin considerar la capacidad de regeneración, "causó una serie de pérdidas, detrimentos o menoscabos significativos para el medioambiente y sus componentes".
Ante esto, argumentan que "es posible establecer que la demandada incumplió con el deber de hacer un uso razonable de los recursos naturales renovables, de modo de asegurar la capacidad de regeneración y la biodiversidad asociada a ellos".
En la demanda se establece que Codelco División Salvador -que es dueña del 89% de los derechos de agua en la cuenta del Salar de Pedernales- hizo uso de los derechos de extracción dentro de los límites legales, pero no consideró la capacidad de regeneración del recurso hídrico, ni la biodiversidad asociada, lo que generó consecuencias de gran magnitud y relevancia.
En la demanda se estipula que Codelco debió prever que sus extracciones de agua afectarían el componente hídrico, la vegetación y los ecosistemas de la zona, más aún, por el carácter de sitio prioritario de Conservación de Biodiversidad con el que cuenta el salar desde el 2002.
Otro de los aspectos que se fundamentan son los requisitos que establece la ley para configurar el daño ambiental y que dice relación con la acción u omisión; culpa, daño y la relación de causalidad entre la conducta de la empresa y el daño.
El documento presentado ante el Primer Tribunal Ambiental precisa los detrimentos significativos para el medioambiente y sus componentes debido a la extracción de agua, en especial porque se han dañado los componentes ambientales abióticos y bióticos que permiten que el salar sea un ecosistema único en el que se encuentra flora y fauna de características únicas, como por ejemplo, las vegas altoandinas y animales en peligro de extinción como el guanaco, el puma, el gato colocolo y la vicuña.
Para el Consejo de Defensa del Estado la empresa minera debe hacer un uso razonable del componente hídrico con el fin de asegurar su regeneración y permanencia, porque se trata del elemento esencial para los ecosistemas propios del Altiplano del Norte del país.
En su demanda se le solicita al tribunal, se le exija a Codelco reparar materialmente el daño mediante obligaciones relacionadas con un plan de monitoreo y control que contribuya a recuperar el acuífero del salar, el que debe ser presentado previamente a la Dirección General de Aguas (DGA).
También, pide que la empresa presente ante el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), diversos estudios de flora, fauna y del ecosistema singular y único que presenta el salar y que depende de la disponibilidad hídrica del acuífero que existe en el lugar. Y por último, que la empresa establezca medidas de protección y conservación con el fin de eliminar amenazas y/o restaurar ecosistemas deteriorados.
¿qué pasará con rajo inca?
Según informó El Mercurio, de prosperar la demanda, queda en riesgo el futuro de la iniciativa que está en desarrollo estructural. La iniciativa tiene prevista una inversión de US$1.200 millones y quedará en congelador ante la situación judicial. En algunas semanas, el directorio de Codelco analizaría la aprobación del proyecto inversional de Rajo Inca, instancia que deberá ser postergada dada la incertidumbre sobre la aplicabilidad de la Resolución de Calificación Ambiental obtenida recientemente.
Esto porque según fuentes de la cuprífera, el agua que utiliza División Salvador tiene su origen desde el Salar de Pedernales.
El Diario de Atacama solicitó una versión del tema a Codelco, sin tener respuesta hasta el cierre de esta edición.
La División Salvador
La División Salvador de Codelco comenzó a explotar sus minerales en 1959 y actualmente opera los yacimientos subterráneos Inca y las minas Campamento Antiguo, Quebrada M y otros explotados a rajo abierto. En el año 2017 se aprobó el Proyecto "Continuidad Operacional División Salvador", que consideró la extracción y beneficio de minerales sulfurados y oxidados de cobre, con una vida útil de 6 años.
El 28 de febrero de 2020 se aprobó el Proyecto "Rajo Inca" que extiende la vida útil de las faenas mineras, antes señaladas, por un período de 47 años.