Siempre debemos ir un paso adelante
Estudiantes que se suben a un techo para tener internet o una profesora en Alto del Carmen que recorre a caballo por tres horas para ayudar a estudiantes son el reflejo que en tecnología estamos en las "cavernas". Queda preguntarse si estamos quedándonos atrás en otros ámbitos como la ciencia. Chile vive el "día a día", más en pandemia, pero no se entiende que, por ejemplo, Atacama puede recién tener una seremi de Ciencia en cinco años.
La historia dice que a América los avances del mundo siempre llegaron más atrasados que a Europa. Sin embargo, Estados Unidos se fue distanciando de esta realidad y hoy se convirtió en superpotencia, aunque cabe destacar que en coronavirus está lejos de ser un ejemplo pero eso es por la desidia de su Presidente y otros factores. Con su tecnología se podría estar haciendo más.
¿Qué fue lo que pasó? En el caso del país norteamericano por mucho tiempo tuvo la evidente influencia de Inglaterra, que hasta comienzos del siglo XIX era líder mundial, pero fue perdiendo terreno principalmente en el área industrial. Actualmente sigue manteniendo su influencia, pero no es la misma.
En paralelo, Estados Unidos decidió ir siempre un paso adelante de sus "conquistadores" estableciendo líneas eficientes y productivas, sorteando incluso la gran crisis económica de 1929 y convirtiéndose en el banquero de los países europeos en el periodo entreguerras.
Los avances le han permitido tener una rica tecnología, que parece tan escasa y necesaria en Chile, donde lejos de estar un paso adelante, retrocedemos dos o quizás cuántos cuando conocemos historias de estudiantes que se deben subir al techo para tener un wifi decente o de profesores como Cicilia Gatica que recorre más de tres horas a caballo para ayudar a estudiantes de la Escuela Sara Cruz Alvayay en la localidad de Junta Valeriano, de Alto del Carmen. O qué decir de los constantes reclamos por la lentitud y corte de servicios de empresas.
Antes de la pandemia, Chile nunca agilizó como correspondía tecnología para llegar a más y de mejor forma a los distintos rincones, conformándose con un internet que si bien es mejor que en otros puntos del mundo no es suficiente dado que hoy todo gira en torno a la red.
Chile parece vivir el día a día en este y otros aspectos, por lo que habrá que ver si las acciones son las adecuadas en ámbitos como la ciencia. Sin embargo, el hecho que haya una seremi de la macrozona norte instalada en Antofagasta y que en al menos cinco años haya una seremi en Atacama ya nos está diciendo algo. Parece inevitable que los recursos y esfuerzos se trasladen a otros ámbitos, especialmente en una pandemia, pero debemos replantearnos si este vivir "día a día" requiere muchos más matices para no quejarnos de que no estuvimos un paso adelante.