"Espero que la mesa no sea censurada, porque sería insistir en una lucha de poder que a pocos interesa"
Como una "gran noticia" para Chile Vamos y la democracia calificó el diputado gremialista Jaime Bellolio la sorpresiva elección de Diego Paulsen (RN) y Francisco Undurraga (Evópoli) como presidente y primer vicepresidente, respectivamente, de la mesa de la Cámara, luego que la oposición se fraccionara durante el proceso de votación y no lograra cumplir el acuerdo que establecía esos cargos para Gabriel Silber (DC) y Karol Cariola (PC). El único que salvó invicto de la hecatombe política opositora fue Rodrigo González (PPD) en la segunda vicepresidencia.
- ¿Esperaba que Chile Vamos ganara la presidencia?
- Esto da cuenta de que la política de división, de odio, de trancar permanentemente las propuestas del Gobierno tuvo un efecto concreto en la votación y significó un quiebre de las confianzas. Las recriminaciones que se hacían de lado y lado, especialmente después de lo que hizo el PC después del 18 de octubre, tuvieron consecuencias. Espero que signifique una reflexión en la oposición, que cambien su manera de ser oposición en una lógica obstructivista a una lógica crítica, pero constructiva. Esa es la lección que se debe sacar después de lo que ocurrió en la Sala, lo que claramente fue una gran noticia.
- Desde la oposición hay algunos que están pidiendo la censura.
- Espero que esta mesa no sea censurada, porque sería otra forma de querer bloquear los resultados democráticos que se dan al interior de esta Corporación e insistir en una lucha de poder que a pocas personas del país les puede interesar. El foco hoy tiene que estar puesto en cómo solucionamos la pandemia en la agenda social.
- ¿Para el Gobierno será un aporte que Chile Vamos lidere la mesa?
- Nos queda el desafío como Chile Vamos de dar garantías a todos los sectores, tal como ha sido nuestra tónica, el respeto al reglamento y a las urgencias del Ejecutivo y el Congreso para enfrentar de la mejor manera posible la pandemia. Insisto, espero que la oposición haya aprendido la lección y que no censure a una mesa que va a dar garantías a todos.
- El proyecto de indultos de reos de La Moneda en medio de la pandemia ha generado una fuerte polémica. La oposición se niega a aprobar, además, la ley Humanitaria.
- Se han mezclado dos situaciones que son diferentes. Por un lado, el indulto conmutativo a raíz del 0covid-19 que tiene razones sanitarias y de seguridad pública, y por supuesto razones humanitarias. Sanitarias porque todos sabemos que las condiciones al interior de un penal no permiten hacer el distanciamiento social requerido y de seguridad porque hemos visto en otras partes del mundo motines que terminan afectando la vida de los gendarmes y de los propios reclusos. También humanitarias, porque hay personas de alto riesgo, ya sea por enfermedades de base o de edad. Esto se ha mezclado con la otra discusión que es el establecimiento de una ley humanitaria para personas que estén gravemente enfermas o en etapas terminales de su vida y que no tiene que ver con el covid-19, pero donde se puede hacer un indulto conmutativo, es decir, que terminen su condena en sus hogares y que puedan morir en sus casas y no en la cárcel. Es un tema profundamente humano y yo estoy a favor de ambas leyes. Contraponerlas es un sinsentido.
- El presidente de RN, Mario Desbordes, calificó la primera ley de pobre y discriminatoria y criticó que el ministro de Justicia haya legislado para la oposición.
- No creo que se haya hecho de una forma para darle el gusto a la oposición. Es una ley que en sí misma se justifica por la razones que he esgrimido y que son acciones que también se han aplicado en otros países. No hay una decisión arbitraria cuando se sostiene que el criterio se aplica a todos como, por ejemplo, que todos los delitos de sangre no pueden acceder a este beneficio. Sin embargo, la otra discusión sobre la ley humanitaria sí incorpora delitos graves porque el foco está puesto en otro punto y es que la persona no muera en la cárcel por enfermedades graves, sino que lo haga en condiciones dignas. Y aquí hay un punto que han abordado diversos filósofos y expertos en DD.HH., de que cuando hay alguien que ha violado los DD.HH. actuó sin la consideración de la dignidad del otro, y la pregunta es si la sociedad debe contestar exactamente de la misma forma. La respuesta que han dado estas personas es que no. Y precisamente como respetamos la dignidad humana, no se puede hacer lo mismo que habrían hecho ellos. Esa diferencia es la que hace que una sociedad sea más avanzada.
- En el caso de la ley humanitaria, Desbordes cuestionaba la actitud de la oposición y reclama que hasta ahora este tipo de beneficios han operado para un sólo lado, para la izquierda.
- Respeto las opiniones de Mario Desbordes y entiendo que él lo hace queriendo representar un sentido de justicia y que es de todo lógico, pero esos son hechos diferentes cuando vienen de quien ostenta el poder estatal versus grupos terroristas como el Lautaro, el FPMR, que no tienen la misma capacidad. Ambos hechos son de la mayor gravedad. El terrorismo es una violación a los DD.HH. en el estándar internacional y por supuesto que me gustaría que hubiera equilibrio, en especial cuando vengo de un partido donde su fundador, Jaime Guzmán, fue asesinado por el FPMR y donde hasta hoy es un delito que sigue en la impunidad.
- La oposición manifestó ayer estar dispuesta a llegar a un diálogo franco con el Gobierno y el oficialismo...
- Me gustaría, pero hay distintas oposiciones que en medio de la pandemia han exacerbado lo que veníamos viendo antes y especialmente después del 18 de octubre. Hay una oposición que está disponible a llegar a consenso y a acuerdo, pero hay otra que está buscando que al Gobierno le vaya lo más mal posible y el mayor tiempo posible. Luego que salió el dictamen de la Dirección del Trabajo se votaba en el Congreso que los trabajadores pudieran acceder al seguro de desempleo, más la fórmula que presentaba el Gobierno para suplir ese seguro cuando se agotaran los fondos individuales. Y hubo quienes desde la izquierda no dialogante votaron en contra con el fin de que la crisis que se produjo con el dictamen de la Dirección del Trabajo durara más tiempo. Esa pequeña política se ve demasiado seguido en el Congreso y uno esperaría que en esta pandemia, donde nadie puede pretender ganar en el largo plazo o ganar ventajas políticas, esa pequeña política no fuera la tónica. No estoy pidiendo que la oposición sea obsecuente, sino que sea responsable, tal como lo fuimos nosotros durante una pandemia cuando fuimos oposición, que haya más cooperación política porque es beneficioso para la gente. Esta pandemia no se resuelve tratando de hacerle zancadillas al otro, sino que tomando decisiones en conjunto.
- A propósito de la pandemia, Chile ya tiene 5.116 casos y junto con Brasil es el país de Latinoamérica con más contagiados, pero con un número acotado de muertos: 43. ¿Lo estamos haciendo muy mal o muy bien?
- La principal razón de que tengamos más casos que otros de la región es por la capacidad de hacer testeos. Esto muestra que estamos en la senda correcta, pero jamás habría que caer en una suerte de exitismo o caer en la fórmula radical de criticarlo todo. En los comparados internacionales, Chile hasta el momento lo ha hecho bien, pero falta muchísimo porque esto está recién comenzando. Recién partimos y en esa partida estamos relativamente bien. El objetivo de la política debe ser que haya la menor cantidad de muertos. Viene la campaña de invierno y vamos a vivir momentos más difíciles aún porque Chile no ha llegado al peak, como ya ocurrió en Italia y España, y para evitar estas situaciones es que se están tomando medidas drásticas.
- Ante la crisis económica se ha levantado la opción de retirar fondos de las AFP. ¿Qué opina?
- Mientras más baja la curva se extiende más el impacto económico y hay gente que piensa que pensar en economía es pensar en un ente abstracto. Y no, pensar en la economía es pensar en los alimentos y la subsistencia y las medidas que ha tomado el Gobierno son las iniciales y faltan muchas más, como incorporar en los beneficios a los que tienen empleos informales. Creo que recurrir a los fondos de pensiones es una mala medida frente a una pandemia o a algo que puede durar un año, porque ¿cómo se recomponen? Yo preferiría una política pública donde el Gobierno toma la deuda y donde focaliza los esfuerzos en los más vulnerables. Sin embargo, estaría abierto a analizar esa opción más adelante.
- La foto del Presidente Piñera en la Plaza Italia desató un fuego cruzado. ¿Qué piensa al respecto?
- Me sorprendí, al igual que muchas otras personas. Era algo innecesario y que da una señal confusa y contradictoria, en especial si estamos en cuarentena. Ahora, obviamente las plazas son de todos los ciudadanos y nadie puede pretender la propiedad sobre uno u otro espacio público.
"Hay una oposición que está disponible a llegar a consenso y a acuerdo, pero hay otra que está buscando que al Gobierno le vaya lo más mal posible y el mayor tiempo posible".
"Hay un punto que han abordado diversos filósofos y expertos en DD.HH., de que cuando hay alguien que ha violado los DD.HH. actuó sin la consideración de la dignidad del otro, y la pregunta es si la sociedad debe contestar exactamente de la misma forma".