Redacción
El pasado domingo llegaba el momento más duro de este Dakar. La muerte del piloto portugués Paulo Gonçalves golpeaba a todos los competidores. Más aún a Pablo Quintanilla.
El chileno era uno de los amigos del histórico corredor luso y la tragedia lo sacudía con fuerza. Reponerse no sería nada fácil, pero había que hacerlo para seguir en competencia. Y el criollo lo hizo a lo grande.
Tras la suspensión de la jornada del lunes, ayer el sanantonino salió con todo en la reanudación de la categoría y con una gran carrera se adjudicó su primera etapa en el Dakar 2020.
"Quintafondo" no sólo ganó el día, también recortó una importante distancia con el líder de la general: Bajó en casi 4 minutos su diferencia con el estadounidense, Ricky Brabec, y quedó a poco más de 20'.
Lo del chileno fue espectacular. Comenzó la jornada octavo y lentamente fue acelerando su andar. Así tras la mitad de la especial, de 410 kilómetros, agarró la punta y no la soltó más.
Y tras tomar la cima, el criollo fue por más. Aceleró en el tramo final y fue aumentando su diferencia con el líder de la categoría hasta llegar a la meta con casi 4 minutos de ventaja sobre Ricky Brabec.
Sólo quedan tres etapas y ahora Quintanilla tendrá que ir por todo si quiere seguir soñando con el título.
Su compatriota José Ignacio Cornejo no tuvo un gran día. Acabó octavo en la etapa y cayó del tercer al quinto puesto en la general.
El líder es el estadounidense Ricky Brabec con un tiempo acumulado de 31 horas, 59 minutos y 29 segundos, le sigue Pablo Quintanilla, que está 20' 53'' y tercero aparece el piloto australiano Toby Price, que está a 26' 43''. José Ignacio Cornejo figura en el quinto puesto a 29' 29'' de Brabec.