Importancia del Estrecho de Magallanes
El Estrecho de Magallanes fue un descubrimiento que cambio la comprensión del espacio geográfico, algo que en el inicio de nuestra vida independiente como país era punto de preocupación. Es así como con su visión geopolítica en su lecho de muerte Bernardo O'Higgins al repetir "Magallanes, Magallanes…", nos demuestra una visión de país que debía asumirse, lo que se concretó posteriormente con uno de los estadista menos estudiados en la historia de Chile, el presidente Manuel Bulnes en el año 1842, lo que finalizó con la toma y posesión del Estrecho de Magallanes y sus tierras adyacentes en 1843 ocasión en que un grupo de chilenos embarcados en la goleta Ancud desembarcaron en Puerto del Hambre.
Es desde esta época que las Fuerzas Armadas y en especial el Ejército de Chile, contribuyen geoestratégicamente a la geopolítica nacional aportando principalmente a lo que hoy le podemos llamar como soberanía efectiva, demostrando que aquel Fuerte Bulnes fue la proyección de la soberanía nacional a tan alejadas tierras.
Francisco Sánchez, historiador
Piñericosas en el Te Deum
El Te Deum pasado nuevamente nos recuerda "las Piñericosas", primero tomando un café para hacer tiempo a la vista de la prensa... nada menos que con la banda presidencial y cruzado de piernas.
Después en su afán de figurar casi se cae del carruaje, creo que en el servicio religioso dio gracias a Dios que se pudo apoyar en la espada de su edecán militar, ¿se podría decir que Piñera busca apoyo del ejército?
Finalmente, aunque hay muchas mas, su constante gesticulación y miradas al cielo como pidiendo que "se terminara luego", hay que reconocerlo hoy las redes sociales y medios de comunicación nos permiten ver en forma distinta las personalidades de nuestros gobernantes.
Ernesto Fuentes
Medalla a Veteranos de 1978
El pasado 16 y 17 de septiembre se entrego por parte del Senador Francisco Chahuán Chahuán una condecoración a casi 2000 veteranos del Conflicto del Beagle, así como también a instituciones que han colaborado a la difusión y puesta en valor de este importante acontecimiento de nuestra Historia.
Llamo la atención de que manera estos veteranos llegaron con sus insignias y reliquias, muchos se emocionaron y más aun sintieron profundo orgullo de contar su historia, la cual trascendió a la coyuntura política que vivía nuestro país.
La medalla es un símbolo que viene a saldar en parte una deuda que el Estado de Chile tiene con quienes partieron a la frontera y en diferentes puntos de apoyo a la fuerza de defensa de nuestra Patria y que no han tenido un homenaje como corresponde.
Es interesante destacar que al Senador Chahuán no se le olvido Carabineros, tal como en el homenaje que él mismo encabezo en el senado el pasado 21 de diciembre pasado, cuando presento el libro "1978: Tempestad en el Beagle" obra que recoge cientos de testimonios de veteranos y que es una joya para las futuras generaciones que quieran conocer del conflicto que tuvo a Chile y Argentina al borde de la Guerra.
Hugo Ramos
Hemos de crear conciencia
Urge liberar nuestra existencia de tantos abecedarios tóxicos que lo único que hacen es distanciarnos unos de otros, acrecentando los sufrimientos y las dolencias del alma. Para empezar, es un criterio de humanidad, confiar más en nosotros mismos, pues en medio de estos perecederos tormentos terrenales, que proliferan por todo el planeta aterrorizándonos, hay un camino de maduración que nos da aliento y nos fortalece para mirar hacia adelante, con otro espíritu menos nostálgico y más creativo, en cuanto a que debemos introducir otra seguridad, como es la confianza mutua en el ser humano como tal. Desde luego, este mundo cambiante con sus desafíos globales, no puede persistir en el desengaño. Hemos de forjar un esfuerzo conjunto entre todos los moradores. Es el único modo de resolver los muchos retos a los que nos enfrentamos. La seguridad en uno mismo, concertada con la de los demás, es el primer paso resolutivo hacia los intereses comunes. Esta visión nos compromete a ser más auténticos, a trabajar con otra lucidez más nívea, a encarnar otras aspiraciones de encuentro reconciliado con nuestro análogo, a vivir y a desvivirnos por la grandeza de esta vida, con la que hemos de hermanarnos y saber convivir.
Víctor Corcoba Herrero