Reforma Tributaria
Señor director:
Sobre el proyecto de ley de modernización tributaria, presentado por el Presidente de la República este martes, me gustaría destacar dos aspectos que, sin ser los que ya han generado mayor debate, me parecen importantes para avanzar hacia un país más justo y equitativo, y que podrían ser considerados independientemente de la instauración del sistema integrado total propuesto.
El primer punto es que se ha propuesto que las boletas separen en su contenido el IVA. Así, se permitirá a todos los contribuyentes de dicho impuesto poder ver con claridad la parte que corresponde al Estado, a través de la recaudación del impuesto. Esto es también una medida hacia la transparencia y hacia la conciencia plena de que todos nosotros somos contribuyentes, que tenemos deberes como tales y también la facultad de exigir a nuestras autoridades lo que en derecho y justicia corresponda.
En la misma línea señalada, quisiera destacar la creación en el proyecto, de una Defensoría del Contribuyente, que velaría por el respeto y observancia de los derechos del contribuyente frente al SII. El contar con una institución como la propuesta, permitirá tener un mayor grado de certeza jurídica y hará más accesible a todos la legislación tributaria, que en sí es compleja.
Aun cuando falta ver el proyecto en toda su magnitud, y esperando que los equilibrios fiscales se mantengan resguardados, sería bueno ver convertidos en ley de la República al menos los dos aspectos destacados.
Francisca Labbé
Brote de sarampión: ¿Quién tiene la culpa?
El brote de sarampión en Europa ha levantado las alarmas. Y es que en los primeros seis meses de este año se han registrado más de 41 mil casos de infección por este virus, casi el doble que en todo 2017, y que además han resultado en 37 muertes.
¿Qué ha fallado para tener estas cifras? Mientras algunos apuntan al auge de los movimientos antivacunas, con corrientes alternativas instalando que enfermedades como el sarampión son leves, otros señalan que la ineficacia de los programas de vacunación en algunos países, junto al movimiento de la población, ha llevado a la expansión en el número de contagiados.
Chile no está exento de riesgo, considerando que hoy vivimos en un contexto altamente globalizado. Así, por ejemplo, la no vacunación contra el sarampión, enfermedad que no tiene tratamiento y que produce una mortalidad de hasta un 30%, podría generar una epidemia en menores de 1 año. De ahí que es necesario evitar el fracaso de los programas de vacunación, y el correspondiente aumento de un porcentaje importante de personas susceptibles infectadas.
Debemos recordar, además, que las personas vacunadas contra el sarampión entre 1971 y 1981 recibieron una dosis insuficiente para decir con certeza que tengan inmunidad para la enfermedad. Si su inoculación corresponde a dicho periodo y tiene programado un viaje fuera del país, la recomendación es hacer un refuerzo y acercarse a un servicio público para recibir una nueva dosis. Junto con lo anterior, la población migrante, de no haber recibido la respectiva vacunación, podría, eventualmente, encontrarse expuesta a la enfermedad.
En este sentido, el refuerzo de la inoculación en 1ero básico en el caso de los niños es una forma de fortalecer las medidas de prevención. Y en esta misma línea, se debería incorporar a los migrantes en la atención primaria para identificar la necesidad de refuerzo o de vacunación anti sarampión propiamente tal.
Nelly Baeza, directora del Centro de Salud Pública U. Central
Abortó ¿gratuito?
Este martes ingresó al congreso el proyecto de ley, impulsado por parlamentarias de oposición, que buscaría la legalización del aborto libre hasta las 14 semanas de gestación de forma gratuita. Según el proyecto se busca modificar los artículos 342, 344 y 345 del código penal, que establece penas fuera del régimen de tres causales actual. Era lógico pensar que quienes promovían el aborto bajo tres causales en realidad no estaban buscando eso, sino que más bien era una táctica para luego impulsar el aborto libre. Fuimos muchos los que advertimos tal objetivo, pero se nos trató de faltar a la verdad y de extremistas. Sin embargo, a la luz de los hechos, esto ha quedado demostrado.
Ahora bien, en esta nueva iniciativa parlamentaria llama la atención el acento en la gratuidad. ¿Por qué las personas contrarias al aborto tendrían que financiarlo? El dinero provendría de impuestos generales, incluso de quienes están en contra por profundas convicciones. Más valdría invertir todos esos recursos en acompañamiento efectivo a las madres con embarazos vulnerables que están pensando en abortar.
Nicolás Fernández