Valentina Olivares Licuime
Pese a que ayer fue el último día de plazo para que los conductores de automóviles y motos pagaran su permiso de circulación para el año vigente, el flujo de personas tanto en los puntos de venta de la autorización como de las plantas de revisión técnica en Copiapó se mantuvo constante aunque sin aglomeraciones.
En el proceso, alrededor de 35 mil patentes de vehículos fueron canceladas en el municipio de la capital regional, cifra superior por más de mil respecto al 2017. El monto recaudado desde el 1 al 31 de marzo fue de 2.800 millones de pesos, superior en 300 millones en relación al año anterior, de cuyo total el 62,5% se entrega al Fondo Común Municipal (FCM) lo que equivale aproximadamente a 1.700 millones de pesos. El 37,5% restante permanece en la comuna de Copiapó.
Ana Lorena Arancibia, directora (s) de Tránsito de la Municipalidad de Copiapó, explicó que "los permisos de circulación siempre son los ingresos más importantes que reciben los municipios. Estos recursos la autoridad los destina a los proyectos que la comunidad requiere o son de su interés, es decir, se invierten en la ciudad".
Los precios pagados por el permiso fluctuaron el presente año entre $23 mil hasta $7 millones de pesos. Este último monto fue cancelado por la autorización de tránsito de un Rolls-Royce año 2017.
Los conductores que no cancelaron el documento en el plazo establecido, no contarán con la facilidad de hacerlo en dos cuotas sino que deberán liquidar la totalidad del valor, que considera un interés que incrementa a diario, y no pueden circular con su vehículo debido a que no disponen de la reglamentación. Además, se exponen a infracciones en caso de fiscalización.
Revisión técnica
La capital regional dispone de tres plantas de revisión técnica, que durante la jornada de ayer se encontraban con un marco normal de público.
Lo anterior, según Julio Muñoz, jefe de planta de Revisiones Atacama Limitada, fue un escenario que se repitió a lo largo del mes. "Nunca ha sido un problema sacar la revisión técnica, porque siempre ha estado relativamente vacío. El flujo vehicular ha sido normal, sin muchos automóviles. El jueves pasado revisamos alrededor de 220 autos, lo que es normal, porque podemos llegar hasta 250 o más".
Asimismo, Muñoz precisó que "en marzo se trabaja solamente con los vehículos que vienen con retraso con respecto a la revisión técnica, que han sido rechazadas o han quedado pendientes, donde no existen variaciones de costos".
Una de las personas que llegó el último día a realizar el trámite fue Hellen Schubert, abogado, quien dijo que el aplazamiento de la diligencia fue debido a que "tuve un problema mecánico y los repuestos no estaban en la ciudad. Pero ahora la revisión fue muy expedita, incluso más que el año pasado. No me demoré más de 15 minutos".