"El crecimiento es la viga maestra que hará que el país vuelva a ponerse de pie"
El compromiso de crecer entre 2,5% a 3%, la creación de cerca de 170 mil empleos al año y un "shock" de confianza son parte de la receta con que una segunda administración de Sebastián Piñera pondría el "acelerador" en la economía del país.
Así lo detalló el ex ministro de Hacienda del ex Presidente y actual coordinador de su programa económico, Felipe Larraín, quien adelantó algunos de los elementos que pretende establecer para mejorar los índices de crecimiento y la confianza en la actividad.
Con cerca de 500 profesionales trabajando en el detalle del programa -que aún no tiene un valor específico- y los primeros contactos con el equipo de Felipe Kast, Larraín afirma que el crecimiento es la "viga maestra" de una posible recuperación que ayude a levantar aspectos que ve con preocupación, como la caída en la inversión.
"Si tomamos la proyección 2017 del Banco Central vamos a tener cuatro años consecutivos de caída de la inversión, con el peor desempeño en casi 60 años. Y no hay recesión externa, porque las condiciones externas están mejorando", dijo el académico e investigador.
- Esta semana se conoció que el Gobierno dejará gastos comprometidos sin recursos disponibles que podrían superar los US$ 4.000 en cuatro años. ¿Qué significa eso para las arcas públicas?
- Por primera vez un Gobierno le deja a otro holguras negativas desde que tenemos regla fiscal. Y es un desafío adicional del próximo Gobierno, una dificultad que debe enfrentar cuando se comprometen más gastos que aquellos que son necesarios para cumplir con el compromiso de seguir reduciendo balance estructural. Nosotros dejamos el balance estructural en 0,5% del PIB y nuestro cálculo es que este Gobierno lo podría dejar en 1,5%, o sea multiplicado por tres. Hay un deterioro importante de las finanzas públicas.
- ¿A qué se debe ese deterioro?
- Los hechos objetivos dicen eso, a pesar del esfuerzo que ha hecho este ministro de Hacienda y que yo valoro. Quiero dejar claro que hay tres razones por las que hemos tenido deterioro fiscal. La primera es la caída en el precio del cobre, pero también de la sobre expansión del gasto en los dos primeros años de este mandato, que ha sido contenido en 2016 y 2017. Está también la caída en el crecimiento, que nos ha costado carísima. Por cada punto de caída del crecimiento económico significa que recaudamos US$ 600 millones menos. Los análisis nuestros basados en los datos del FMI indican que dos tercios del problema del frenazo de la economía tiene causas internas. Si atribuyes dos puntos del PIB vamos a tener US$ 10.800 millones que se habrán perdido en cuatro años. Esa pérdida apunta solo al efecto de este conjunto de políticas que le han pegado a la línea de flotación de la economía chilena.
Hacia el balance
- ¿Cómo se ha llevado por parte de este Gobierno el compromiso de balance estructural?
- Creo que hay un compromiso de contener el gasto de la actual autoridad económica, pero no es suficiente para contener estos otros problemas.
- ¿Cuáles van a ser las bases de la política fiscal del programa de Sebastián Piñera?
- Lo primero es que el país necesita un shock de confianza. Y eso se gana cuando hablas con la verdad, pero cuando tienes un discurso disociado entre lo que dices y haces, lesiona gravemente las confianzas. No hablar con la verdad es cuando las máximas autoridades le dijeron al país que la reforma tributaria no tendría efectos de ningún tipo. Eso lesiona el sentido común y fue repetido como monserga por este Gobierno. Y a eso se le suma la "retroexcavadora". Y hablar con la verdad requiere hacerlo con realismo. Por eso nosotros hemos planteado como meta el crecimiento de 2,5% a 3%, que es más de lo que estamos creciendo hoy.
- ¿El mercado laboral será también una herramienta de reactivación en el caso de que el ex Presidente Piñera retorne a La Moneda?
- Hay que ser franco. Lo que ha habido es un retroceso mayúsculo. La hecatombe del mercado laboral viene no solo porque estamos creando un tercio de los empleos. La tasa del 7% esconde cosas. Ha habido un deterioro muy significativo a través de los Cuenta Propia, que ha significado una baja del empleo asalariado privado.
- ¿Y cómo se corrigen las debilidades del mercado laboral?
- La respuesta es que, más allá de lo que uno pueda hacer en cuanto a mejorar una reforma que quedó muy mal hecha, el secreto está en volver a crecer. Es la viga maestra que hará que el país vuelva a ponerse de pie no con un crecimiento de 1,5%, sino que más cerca del 3,5% a 4%. Eso podría permitir doblar el empleo que se está creando en la actualidad, que se acerca a los 85 mil puestos laborales. No vamos a crear el millón de empleos que hicimos en el mandato del ex Presidente Piñera, porque no vamos a crecer al 5,3%. Hemos sido claros en que no vamos a crecer al 5,5%, porque sería un volador de luces.
Costo del programa
- ¿Se puede detallar el costo del programa del ex Presidente?
- No, porque está en confección. Teníamos 500 profesionales y cada día se incorporan nuevas personas. Dentro de poco esperamos tener más personas y extraoficialmente hemos tenido contacto con el equipo del diputado Felipe Kast. Ese es el compromiso que se tomó, porque para eso uno entra a la primaria. Y entiendo que es lo que ha planteado el senador Manuel José Ossandón. Nuestro trabajo se va a enriquecer con esa labor, y mientras antes sea es mejor.
- Solo el ex Presidente Piñera obtuvo en la primaria casi la totalidad de los votos que la centroderecha obtuvo en la primaria de 2013. ¿Qué evaluación hace el comando de esos resultados?
- La lectura es favorable. Contra todo, porque las condiciones no fueron las más favorables, debido al fútbol, la inexistencia de una campaña de promoción de parte del Gobierno y personas que fueron afectadas por estar inscritas en partidos contra su voluntad, se transformó en una fiesta de participación. Celebro que haya participado más de 1,8 millón de personas y que de ese total 1,4 millón haya optado por Chile Vamos.
- ¿Qué palancas de desarrollo regional ve en el escenario actual?
- No hay regiones exitosas en países estancados. Necesitamos un país que mejore los salarios, que tenga oportunidades para los empresarios y que se vuelva a poner de pie en el crecimiento. Todos quienes están trabajando y buscan una retribución justa esperan un país así. Se hace con las confianzas, con entender que se requiere un cambio de mano. Lo digo con respeto, pero este Gobierno no tiene posibilidad de mejorar la economía.
"Por primera vez un Gobierno le deja a otro holguras negativas desde que tenemos regla fiscal. Y es un desafío adicional del próximo Gobierno, una dificultad que debe enfrentar"."
"Hay que ser franco. Lo que ha habido es un retroceso mayúsculo. La hecatombe del mercado laboral viene no solo porque estamos creando un tercio de los empleos. La tasa del 7% esconde cosas"."
Sobre la autocrítica de Valdés
Consultado por la autocrítica que hizo esta semana el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, en orden a que la Nueva Mayoría fue "muy ambiciosa" al emprender la serie de reformas del programa de Bachelet, Larraín comentó que "valoro la autocrítica del ministro Valdés. Pero discrepo en su apreciación: el problema no es haber sido muy ambiciosos, de hecho, no es mala una sana ambición dentro de lo realista. El problema es la muy mala calidad de las reformas de este Gobierno, tanto en su diseño como en su implementación, que le han significado un costo enorme a nuestra economía".