Vías en Copiapó
A propósito de la fotografía publicada el día sábado 25 de febrero de un camión azul cargando agua en la esquina de las calles Chacabuco con Rodríguez es que me permito hacer la denuncia de que dicho vehículo, el mismo de la foto, tiene su revisión técnica vencida hace varios meses, observé dicha situación al llamarme la antiguedad de la maquina fotografiada. La falta de revisión técnica vehicular pone en peligro tanto a sus ocupantes como demás conductores y peatones que circulan por las distintas vías de la ciudad de Copiapó. Un camión con revisión técnica vencida circulando por el centro de nuestra capital regional puede ser una verdadera arma mortal considerando el alto trafico vehicular y peatonal y por ello es necesario que las autoridades respectivas tomen carta en el asunto, más aun considerando que es un camión de una empresa contratista prestando servicios para instituciones del estado.
Sename y cómo lo estamos entendiendo
Si bien el centro en cuestión no es privativo de libertad, nos cuestiona esta entrada y salida de los niños: ¿Por qué se llega a la conclusión que es necesario que ellos sean internados? ¿Cuál es la situación que motiva que vuelvan a entrar? ¿Cuál es el plan que tiene SENAME para que estos niños superen la situación que los llevó a la residencia?
Hoy en día más de 11.000 niños y niñas están internados en SENAME. En promedio, los niños permanecen más de dos años dentro de estas residencias. Es ahí donde aparecen las preocupaciones: ¿Es este un tiempo razonable? ¿Podemos asegurar que una vez transcurrido el proceso el niño volverá a vivir en un entorno que lo proteja y no volverá a SENAME? Al parecer no es así: la tasa de reincidencia de SENAME es del orden de 50%, antes de los dos años.
La Fundación San Carlos de Maipo estima que casi el 70% de los menores que se encuentran en SENAME podrían revincularse con su familia de origen o con alguien de su familia ampliada. Si bien este proceso requiere de una intervención terapéutica especializada, nuestra experiencia nos muestra que esta iniciativa podría reducir los periodos de internación a sólo 8 meses, un 73% menos de tiempo dentro de las residencias.
Como país, la preocupación por los cambios que requiere SENAME no puede depender de los titulares en la prensa, sino de una preocupación real por el futuro que encarnan todos nuestros niños y niñas.
Inmigrantes
Al iniciar este nuevo año escolar recuerdo las palabras del Papa Francisco con motivo de la Jornada Mundial del Emigrante y Refugiado, donde instó a las naciones a generar condiciones que aseguren el bienestar de los niños que han debido abandonar su país de origen.
Las palabras del Papa se vuelven significativas no sólo desde mi rol como educadora, sino además por el llamado a recordar que en el migrante se encuentra Cristo que siendo niño huyó. A días de comenzar marzo comparto mi experiencia como educadora, donde he tenido el privilegio de trabajar en diversos contextos. Recuerdo con cariño el trabajo que realicé en algunas escuelas vulnerables, donde en cada comienzo de año fui testigo de numerosas miradas de niños que reflejaban alegría, ansiedad, nerviosismo y en otras ocasiones desgano. Sin embargo, las miradas que más llamaban mi atención eran la de aquellas madres de niños extranjeros que con incertidumbre se acercaban por primera vez a una escuela en Chile. En sus ojos se observaban sueños y desafíos, temores y alegrías. Y es que muchos llegan a nuestro país buscando oportunidades para un futuro mejor.
En marzo tenemos la oportunidad de tener un gran comienzo como sociedad. Desde nuestros roles de educadores, padres, y estudiantes podemos hacer que tanto los niños como las familias inmigrantes se sientan acogidas por nuestras comunidades escolares. El Papa Francisco nos llama a preocuparnos por los más vulnerables y dentro de ellos pone un especial acento en la infancia migrante que está cada vez más expuesta. "Tienen el derecho-deber de recibir una educación adecuada, sobre todo en la familia y también en la escuela, donde los niños puedan crecer como personas y protagonistas de su propio futuro y del respectivo país."
Señor director:
Francisco Lagos
En la noche del domingo 12 de febrero fuimos testigos de la fuga de un Centro de SENAME de cinco niños de entre 14 y 17 años. Casi no alcanzamos a indignarnos con la noticia cuando nos enteramos de que los menores habían vuelto al centro, por su propia voluntad, el mismo lunes.
Raúl Perry, jefe de Programas de Fundación San Carlos de Maipo
Señor director:
Jacqueline Gutiérrez, , vocera Fundación Voces Católicas