Crítica al alcalde de Copiapó
La posible decisión del Alcalde Marcos López de terminar con el tradicional programa veraniego impulsado por la anterior administración de la Municipalidad de Copiapó, denominado "Verano Azul", dejaría a cerca de 15 mil vecinos, sin poder disfrutar de un día distinto al visitar la playa en el sector de Barranquilla.
Este programa, favorece mayoritariamente, a pobladores modestos, de escasos recursos de nuestra comuna; y para muchos de ellos, era la única oportunidad que tenían, por no tener recursos propios , de pasar un día en la playa, junto a su grupo familiar.
La ley establece que "las Municipalidades son corporaciones autónomas de derecho público, con personalidad jurídica y patrimonio propio, cuya finalidad es satisfacer las necesidades de la comunidad local"
También el examen de la ley permite apreciar que las municipalidades tienen el mandato de atender de manera preferente y prioritaria a aquellos sectores de la comunidad que no pueden satisfacer sus necesidades vitales , de manera autónoma, en el ámbito de las operaciones del mercado.
La eliminación de este programa, conllevaría eliminar un mecanismo con que contaba el municipio para entregar oportunidades a ciertos grupos, que no tienen acceso a la recreación buscando equidad e igualdad de oportunidades para todos.
De ser así, el alcalde López , mostraría su incapacidad de gestionar y continuar una política social eficiente del municipio de Copiapó. Desconociendo como Alcalde que las municipalidades están mandatadas para actuar en el terreno social y en particular frente a problemas de pobreza. La política social se orienta en base a cuatro criterios centrales: debe ser solidaria y equitativa -atendiendo prioritariamente las necesidades de los que tienen menores recursos para igualar oportunidades-, integral -actuando sobre las distintas dimensiones económicas, sociales culturales y ambientales de la pobreza- y participativa -alentando la respuesta de los afectados-.
El propósito último de una acción social que pretende responder con programas solidarios y equitativos a la postergación social de importantes sectores de nuestra población, es buscar superar una condición de carencia como es el caso de la recreación de nuestros vecinos, o en cualquier otro ámbito que ésta se exprese, al interior del espacio de nuestra comuna.
Es en este espacio local donde el alcalde Marcos López, se enfrenta a las personas, recibe sus demandas y se contacta con sus necesidades y prioridades. Esto lo hizo relativamente bien su antecesor, en sus audiencias diarias, donde atendía sin discriminación a todos quienes así lo demandaban; a diferencia de esta nueva administración municipal, cuyo Alcalde, no da audiencias y se encierra en su oficina, haciendo oídos sordos y no queriendo ver, los problemas, las necesidades urgentes e inmediatas, de los sectores mas humildes de nuestra comuna.
¿Donde están los valores de justicia, igualdad y solidaridad que propugnan las ideologías del socialismo y comunismo y que el abrazó y dice promover? Mas allá de una asombrosa y gigantesca falta de humanidad, valores y raciocinio, asombra la incapacidad emocional e intelectual, para resolver un problema que perjudica a personas humildes de nuestra comuna, y que el Alcalde, puede solucionar y ejecutar, ya que depende más que de los "recursos", del convencimiento de que la integración social, equidad e igualdad de oportunidades, no son palabras vacías, o eslogan de las cuales el comunismo se apropió indebidamente, y a los que siempre traiciona. Es este desconocimiento de la naturaleza humana y el origen del funcionamiento social, lo que ha llevado al fracaso las utopías acolectivistas, y hacen que estas sean autoritarias usando el camino de la represión para implantar el sueño (¿o pesadilla?) que proyectan.
Rene Funes, exconcejal de Copiapó
Gracias por servir a Chile
Los dantescos incendios forestales nuevamente han cobrado la vida de un sencillo pero heroico servidor, Héctor Áviles.
Sin embargo, a pesar de los criminales autores de estos incendios sumado a la incompetencia del gobierno, miles de personas siguen prestando ayuda en la zona para controlar este desastre.
Gracias a los cientos de bomberos, miembros de la Defensa Civil, brigadistas de Conaf y técnicos, FF.AA. y Carabineros de Chile, Cruz Roja, ciudadanos organizados y decenas de organizaciones prestan servicios a Chile.
Es lo mejor de lo nuestro, jóvenes y no tanto, que con una voluntad de oro y sincera entrega se encuentran trabajando con escaso descanso.
A ellos un homenaje, esperemos que este desastre no cobre más vidas, como también tenemos certeza que somos un país con personas que libremente están presentes, en distintas instituciones, para ayudar y superar cada uno de los desastres que nos toca vivir como nación.
Gracias muchachos, sigan adelante, su ejemplo y la memoria de los mártires no quedará en el olvido.
Francisco Sánchez