Alejandro Núñez

E l Ministerio de Desarrollo Social entregó los resultados de la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen) 2015 de vivienda y entorno. Dentro de los datos se destaca que Atacama tiene un déficit de casas sociales de más de 8.300 unidades y además un aumento significativo de las familias que viven como allegados de un 18,9% el 2009 a un 51,9% en 2015.

La encuesta Casen es la principal medición de hogares realizada en el país. La versión 2015 incorpora nuevos indicadores que permiten conocer las carencias de los hogares en relación al entorno en que habitan y que han sido incorporados en la nueva medición multidimensional de la pobreza.

Cabe señalar que por primera vez el Ministerio de Vivienda y Urbanismo y el Ministerio de Desarrollo Social entregan una serie completa de datos que permite analizar la evolución histórica del déficit habitacional cuantitativo y cualitativo desde el año 1996 al 2015.

Resultados

Una de las primeras variables que se midieron fue la materialidad de los hogares donde la región obtuvo un 77,9% de las estructuras como aceptables, un 21,4% como recuperable y un 0,7% como irrecuperable.

En cuanto a los índices de conservación de muros, techos y pisos, la zona obtuvo un 65,3% como bueno, un 18,7% regular y un 16% como malo. En cuanto a los servicios básicos, el 96,8% son considerados aceptables y 3,2% como deficitario.

El informe indicó sobre la calidad global de las viviendas que Atacama tiene un 82,4% aceptable estando bajo la media que es un 87,9%. Las estructuras locales recuperables llegan 16,5% y las irrecuperables un 1,1%.

La investigación también apuntó a la condición de vida en las casas. En la región el hacinamiento llegó al 9,4% siendo el promedio nacional un 7,1%. Cabe señalar que el hacinamiento se mide en razón entre el número de personas residentes en la vivienda y el número de dormitorios de la misma, considerando piezas de uso exclusivo o uso múltiple.

Uno de los puntos importantes es que la Casen 2015 cuantificó el déficit habitacional. A nivel país el 2009 la cifra llegó a 447.559 viviendas versus los 391.546 del 2015. En cuanto a la región de Atacama el 2009 el déficit era de 6.795 hogares; el 2011 aumentó a 9.476; el 2013 a 9.043 y finalmente el 2015 se registran 8.355. A pesar de las disminución de la falta de viviendas, los casos de hogares con allegados se disparó de los 18,9% del 2009 a un 51,2% el año pasado.

En cuanto a las formas de financiamiento, el informe puntualizó que en Atacama los propietarios que adquirieron una propiedad entre el 2010 y 2015 en un 32% lo hicieron solo con subsidio estatal, el 9,5% con subsidio estatal y crédito hipotecario y 58,5% sin ningún subsidio estatal.

Finalmente en la variable entorno, la región de Atacama presentó los índices más altos a nivel nacional en que declararon han vivido o presenciado en los últimos doce meses situaciones críticas de contaminación ambiental.

Análisis

El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción de Copiapó, Juan Arroyo comentó que "estos resultados, sobre todo en su lado negativo, están influidos por un fenómeno que en Atacama -y otras zonas del norte de Chile- no se ha podido abordar de buena manera, que ha sido la proliferación de tomas y campamentos, que tienen una alta precariedad en su construcción, lo que impacta en la calidad de la vivienda".

El profesional añadió que "aquí hay un tremendo desafío en la región, tomando en cuenta que se deben generar políticas a largo plazo para poder abordar esta dinámica, generando más proyectos sociales -recordemos que en Vallenar en casi siete años no se construyó ninguno- y para esto es fundamental contar también con una proyección de terrenos, asociados a un Plan Regulador Comunal actualizado".

Para Arroyo "lo más relevante es que hay un trabajo importante a nivel de viviendas que se debe hacer en la región, particularmente dándole un nuevo impulso a la vivienda social, donde creemos que proyectos de financiamiento mixto, como el DS116 del Ministerio de Vivienda, es un buen ejemplo a seguir. Para eso, se debe generar una política de vivienda que sea a largo plazo, que considere las características propias de la zona".

Por su parte el seremi de Desarrollo Social, Antonio Urbina indicó que "esta es una radiografía de la realidad que estamos viviendo y con eso no hay que asustarse, hay que tomarlo en positivo y tiene que ser un desafío para enfrentar lo que vienen más adelante".

La autoridad enfatizó que "si bien es cierto en términos generales hemos bajado el déficit habitacional, a pesar de que aún sigue siendo grande y nosotros estamos abocados de que esto se resuelva en concreto en la región con una estrategia que estamos viendo con los tomas en los sectores altos".

Cabe señalar que una vez emitido el informe de la Casen 2015 se espera la realización de un gabinete especial en que participen los seremi de Medio Ambiente y Vivienda y Urbanismos para exponer las cifras y determinar el camino que se llevará para intervenir esta realidad.

"Esto hay que tomarlo como una oportunidad, hay que hacerle ver a los municipios y en general el Gobierno Regional tenemos que ponernos a pesar como mejoramos esta región"

Antonio Urbina, Seremi Desarrollo Social"

8.355 viviendas es el déficit habitacional que existe en la región de Atacama según la Casen 2015.

3.989 hogares fueron encuestados en la medición de la Casen 2015 en la región de Atacama. En total fueron más de 13 mil personas consultadas.

Edio Cortés Lara es el nombre del extrabajador que ayer comenzó una caminata desde la Plaza de Armas de Copiapó para llegar a La Moneda. Esto porque acusa haber sido víctima de un accidente laboral que tanto Candelaria, la empresa contratista Boart Longyear y Achs, estarían ocultando. Hoy pide una pensión ya que a raíz del incidente se encuentra inhabilitado para trabajar.

En junio de 2013, Edio se encontraba trabajando como ayudante de perforista para la empresa Boart Longyear Chile Ltda. que en ese momento prestaba servicio de contratista en sondaje para la Minera Candelaria. En una noche de turno, asegura que fue impactado por una de las barras de sondaje que manipulaba un operador, recibiendo un golpe en el brazo derecho y siendo atrapado por ésta. "Sufrí un evento traumático laboral en donde hubieron varios testigos y lamentablemente se ocultó todo perjudicando mi estado físico", explicó Cortés.

Luego de esto le dieron reposo y una vez terminada su licencia médica, acudió a la Achs de La Serena y alrededor de tres días después recibió una carta de aviso de término de contrato.

A raíz de estos hechos, el ex empleado realizó una demanda de tutela laboral y por despido. La primera fue rechazada, y por considerarlo un despido injustificado, fue acogida la segunda, incrementando el porcentaje de indemnización. "Llevo tres años sin derecho a nada, no he podido reintegrarme laboralmente porque estuve un año en tratamiento por orden de la Achs, infiltrado, con terapia", relató el demandante quien hoy presenta la enfermedad "codo de tenista" que lo habría dejado incapacitado para trabajar.

Desde Candelaria aseguraron que "el caso fue investigado, fue visto por los organismos fiscalizadores y judiciales que son competentes ahí, y ellos ratificaron que lo ocurrido al señor Cortés Lara no era un accidente del trabajo".