Hillary Clinton inicia una etapa inédita para tratar de llegar a la Casa Blanca
EE.UU. La candidata deberá definir los roles que tendrán Bill y Chelsea Clinton.
Con la ilusión de conseguir un tercer mandato consecutivo para su partido y convertirse en la primera Presidenta de EE.UU., Hillary Clinton iniciaba ayer una etapa sin precedentes en la historia política de su país como la candidata demócrata para las elecciones del 8 de noviembre próximo.
La ex Secretaria de Estado recibió el miércoles el apoyo entusiasta del Presidente Barack Obama -su rival en las primarias del Partido Demócrata de 2008- y ahora se apresta a hacer definiciones en torno a su campaña, entre ellas el rol que tomarán su marido y ex Presidente, Bill Clinton, y su hija Chelsea, que ha mostrado ser un pilar clave para su madre.
La ex primera dama, de 68 años, también deberá lidiar con la controversia de los correos electrónicos del Comité Nacional del Partido Demócrata, de cuya filtración su equipo responsabiliza al Gobierno ruso y que causó la renuncia de la presidenta de dicha instancia.
El compañero de fórmula de Clinton y candidato a la Vicepresidencia, Tim Kaine, señaló que la nominada buscará ganarse la confianza del electorado con un mensaje distinto al entregado por su rival republicano, Donald Trump, quien simplemente ha llamado a los votantes a "creer" en él.
Y mientras el Partido Republicano intentará unirse en torno al magnate inmobiliario, tras unas hostiles elecciones primarias, el equipo de Clinton se propondrá "subir a bordo" a los adherentes de Bernie Sanders.
El rol de Chelsea
Estaba previsto que Clinton aceptara anoche la nominación con un discurso en que abordaría temas como la inclusión y las oportunidades. En el escenario del Wells Fargo Center de Filadelfia sería presentada por su hija Chelsea, quien ya en la Convención de 2008 -cuando salió elegido Obama- la tildó de "heroína".
Chelsea ha jugado en esta campaña un papel fundamental para endulzar la imagen de su madre, quien, según analistas en EE.UU, ha conseguido sacar su lado humano y retratarse como una "abuelita" gracias a sus dos pequeños nietos.