Alejandro Núñez

Sin duda el 2015 será un año recordado en la historia de Atacama por ser protagonista de una de las catástrofes más grandes en Chile y también a nivel mundial. A casi 12 meses de lo sucedido, el intendente Miguel Vargas realizó un balance de las tareas realizadas y aclaró algunos cuestionamientos de la reconstrucción.

¿Cómo han sido estos doce meses después de la catástrofe del 25 de marzo?

-Un año difícil dada la magnitud de la catástrofe. Hay que tener presente que esta fue catalogada por la Organización Mundial de la Salud como una de las 10 más grande a nivel mundial considerando la cantidad de territorio afectado. Acá fueron cinco de las nueve comunas que se vieron fuertemente golpeadas. Nosotros nos mantuvimos en estado de emergencia hasta el mes de noviembre y podríamos decir que algunos territorios duraron mucho más porque el servicio de agua potable se restableció completamente en el mes de diciembre en Diego de Almagro y la localidad de El Salado, por la magnitud de daños. Yo creo que el balance es más positivo que negativo, aquí tuvimos que sacar mucho barro, limpiar todas las redes de alcantarillado, basta recordar cómo estaba la ciudad en esos primeros meses y muchos pensaban que íbamos a estar hasta diciembre limpiando alcantarillado y lo hicimos en tres meses.

Críticas

¿Cómo toma las críticas que indican que el proceso de reconstrucción ha sido lento?

-Nosotros siempre consideramos las críticas porque hay que escuchar, ver si tienen fundamento y la capacidad siempre está presente. Hay una crítica que es claramente interesada y que tiene que ver con otras motivaciones y eso lo entendemos. Pero catalogar como lento un proceso de reconstrucción que parte en el mes de noviembre, cuando la Presidenta anuncia los recursos recién en Chañaral y estamos a marzo, por lo que la reconstrucción netamente tal lleva más de tres meses y tenemos un avance de 21%. El horizonte de tiempo de la reconstrucción es de cinco años y todo proceso de este tipo es similar. La propia Presidenta estuvo entregando viviendas este año producto del tsunami del 2010 y nosotros vamos a tener solucionado todos los problemas relacionados con viviendas en dos años. Es decir el 2016 vamos a tener todas las viviendas reparadas y el 2017 todas las viviendas repuestas en sitios propios.

¿En qué consiste este 21%?

-Entrega de subsidios fundamentalmente donde está el grueso de esta inversión, trabajos preliminares en materia de obras hidráulicas, apoyo a los emprendedores a través de los programas de fomento productivo y tienen que ver con los proyectos que estaban programados para el 2015 dentro del cronograma de la reconstrucción. Nosotros hemos dicho que a finales del 2015 y 2016 el esfuerzo principal es la vivienda, 2016 diseño y ejecución de las obras hidráulicas y 2017 materialización de las grandes obras hidráulicas.

¿Cuánto será el costo de la reconstrucción total?

-La reconstrucción tiene un presupuesto equivalente a 500 millones de dólares y eso fue lo que anunció la Presidenta. Cuando en su momento se anunciaron recursos para las zonas afectadas por los aluviones eso contempló Antofagasta, Atacama, Coquimbo y además contemplaba fondos para la emergencia y para la reconstrucción.

¿Se les pagó a los proveedores dado que esto también se cuestionó?

-El pago a los proveedores a través del Ministerio del Interior llegó casi a los 25 mil millones de pesos, por lo tanto no es efectivo que no se haya pagado. Están absolutamente pagados y lo que está pendiente es lo que no se ha podido acreditar porque aquí no puede llegar cualquier persona a exigir para que se le pague y tiene que demostrar que efectivamente el trabajo se hizo, tiene que haber un contrato de por medio, un registro de horas trabajadas y los procesos de auditoria funcionan.

¿Cómo toman los casos de personas que se hicieron pasar por damnificados para obtener el Bono Enseres?

-Vamos a ser inflexibles con quienes pretendan aprovecharse de los recursos de todos los chilenos y con esos no se juegan. Nosotros teniendo evidencias hemos presentado denuncias en los tribunales contra todos quienes recibieron el Bono Enseres entregando información falsa.

Viviendas

¿Respecto a las viviendas en sitio propio, ya está determinado las zonas en que se construye definitivamente y donde no?

-Eso está definido, las zonas de riesgo están totalmente definidas y lo que pasa es que la gente se resiste a creer lo que se le informa. Nosotros también hemos dicho que no vamos a sacar a nadie, pero no vamos a colocar ningún subsidio en el sector. No le pidan al Gobierno subsidios si la familia está en una zona de riesgo.

¿Cómo se va a evitar que la gente vuelva a poblar estos lugares?

-Vamos hacer obras de mitigación importantes como parques inundables, áreas verdes y la idea es construir en esos lugares que son definidos como zonas críticas. Vamos a ser muy rigurosos con las herramientas que el Estado tiene para evitar que se produzcan ocupaciones ilegales.

¿Hay barrios de emergencias instalados en distintas comunas de la zona, qué va pasar con ellos?

-Yo quiero ser muy claro, los barrios de emergencia son soluciones transitorias y no definitivas, por lo tanto una familia que está en un barrio de emergencia va a tener que abandonar el lugar cuando se le repare la casa o cuando se construya la vivienda definitiva en un terreno nuevo o propio. Esperamos que en un plazo de dos años ya no tengamos estos barrios de emergencia.

¿A su juicio cuál será el mayor desafío en la reconstrucción de este año?

-Sacar adelante todas las iniciativas en el ámbito de la vivienda como que se cumplan los plazos, porque este 2016 tenemos que cumplir en un 100% con las casas reparadas y ojalá no en diciembre sino a mitad de año. También tenemos que reponer todas las viviendas en sitios propios, pero para que eso ocurra todos los que intervienen en la cadena tienen que cumplir su rol porque lo que el Gobierno hace es entregar el subsidio, pero quien ejecuta la obra es una empresa contratista que es contratada por una entidad patrocinante que puede ser municipal o privada.

5 años es el plazo que tiene contemplado el Gobierno para que finalice la reconstrucción en su totalidad.

100 mil millones de pesos por lo bajo se invirtió durante la emergencia según informó el Gobierno Regional.

El sector de La Florida se encuentra ubicado a un costado de la ruta C35 que une a Copiapó y Tierra Amarilla, precisamente, en la franja de tierra donde limitan ambas comunas. Y es allí donde se pretende construir uno de los proyectos habitacionales más ambiciosos de los últimos tiempos. Ello, en un terreno urbanizado de más de 35 hectáreas, el cual sería destinado íntegramente a la construcción de viviendas para dar solución habitacional a casi 850 familias de Tierra Amarilla y otras zonas aledañas.

Es por tal motivo que durante el fin de semana, el alcalde de Tierra Amarilla, Osvaldo Delgado, gestor de la iniciativa, dispuso de ocho buses, los cuales permitieron a casi 300 personas, pertenecientes a los comités de vivienda de Tierra Amarilla, desplazarse hasta el sector de La Florida, para conocer, in situ, el lugar donde serán construidas sus próximas viviendas definitivas.

Iniciativa

"Este proyecto no es nuevo. Llevamos trabajando casi dos años en esto, y en la cantidad de personas que han postulado a él se nota el respaldo, pero también la necesidad de viviendas urgente que tiene la comuna de Tierra Amarilla, la necesidad que tienen las casi 850 personas inscritas en los comité de vivienda actualmente. Mi compromiso como alcalde es sacar adelante este proyecto emblemático como es La Florida, barrio que estará conectado con Copiapó. Son viviendas de mil UF, donde también tenemos factibilidad de luz y agua, y lo más importante es que serán emplazadas en una zona segura, donde tras el aluvión no ingresó nada de barro", indicó el edil tierramarillano, Osvaldo Delgado.

Según lo planteado por Delgado, "hemos comprometido la adquisición de estos terrenos, y ya estamos trabajando para acceder a los fondos requeridos, a través del convenio establecido entre la Municipalidad y Minera Candelaria".

Agregó que "el tema de la proximidad con la Fundición Hernán Videla Lira se resolverá de aquí al 2018, cuando sus emanaciones disminuyan por ley a un mínimo imperceptible. Por lo tanto estoy muy contento, porque además el Intendente se comprometió públicamente a gestionar los subsidios, y trabajar codo a codo con la gente de Tierra Amarilla. Esperamos instalar la primera piedra este mismo año, y así dar el puntapié inicial a las labores en terreno".