Una docena de cajas contenedoras de basura de 15 toneladas cada una en promedio, se han llenado y retirado durante las últimas dos semanas de la vivienda de un adulto mayor que vive en Copiapó y que sufre el mal de Diógenes.

El caso de G.V.C.U de 73 años, fue ampliamente difundido por los medios de comunicación local cuando el 2 de febrero la casa, ubicada en la calle Juan Antonio Ríos, fue allanada por personal de Carabineros y la Seremi de Salud en conjunto con los servicios de salud pública y municipal.

A dos semanas de iniciados los trabajos de fumigación y desratización del lugar, el personal sigue trabajando en la vivienda desde donde se han retirado poco más de 180 toneladas en una labor que dentro de al menos unos tres días recién estará completa.

El encargado de la cuadrilla de funcionarios de la empresa Siglo Verde, Herman Saavedra, quien se desempeña en el lugar junto al equipo, sostuvo que "hace aproximadamente dos semanas que estamos trabajando en la limpieza de este lugar, hemos sacado como 20 ratones muertos como de entre 25 y 30 centímetros cada uno, hemos llenado el contenedor unas nueve veces con escombros y basura. Si se saca la cuenta que estos hacen más o menos unas 15 toneladas eso suma 135 toneladas". A esta cifra se suman los tres contenedores con desperdicios que retiró durante los primeros días el equipo de la Dirección de Operaciones (Doper) de la municipalidad de Copiapó.

En total 12 contenedores se han logrado sacar de la vivienda, unas 180 toneladas de desperdicios.

El director de la Dirección de Operaciones Municipales Hugo Torres sostuvo que "ha sido un trabajo bastante largo. En el lugar existían además muchos cartones y madera lo que podría transformarse en un riesgo grande frente a un incendio".

En la vivienda se encontraron además los restos óseos de gran cantidad de perros y gatos. Según comentaron quienes trabajan en el sitio, al menos cuatro de estos son gatos que estaban al interior de la casa envueltos en prendas de vestir y atados posiblemente para que no escaparan y habrían fallecido por la falta de alimento.

Vecinos

Consultados los vecinos del sector se manifestaron muy satisfechos por las obras de limpieza, aunque han debido soportar los fuertes olores que emanan del recinto y la presencia de ratones en sus domicilios, los que han escapado del movimiento que se genera en la vivienda.

"Nosotros vivimos por el sector de la calle Pedro Aguirre Cerda y nuestro patio colinda con esa casa. Hemos tenido muchos problemas con los ratones, tuvimos que mover los muebles para lograr sacar algunos que se pasaron para este lado. En la noche, sobre todo en el entretecho, se siente la bulla. Afortunadamente tenemos gatos y estos han ayudado mucho", señaló Juan Carlos Yáñez.

El vecino añadió que "nosotros matamos ya tres de estos bichos y son muy grandes, como de 20 centímetros. Hemos estado desinfectando el patio todo los días con cloro, pero es durante la noche que aparecen estos animales con todo el movimiento que tienen en la casa de este caballero, pero encuentro bueno que se haga porque si no esto iba a continuar. Esperemos que pase pronto para volver a la normalidad".

Sonia Arancibia es otra de las vecinas del sector, la mujer comentó que "creo que todas la molestias que hemos tenido valen la pena si se puede sacar la cantidad de estos bichos que tenemos acá, aparte de los ratones hay muchas moscas".

Otro de los vectores que se suman a las ratas y moscas es la gran cantidad de pulgas que aún quedan en el sitio.

"Hemos tenido muchos problemas con los ratones, tuvimos que mover los muebles para lograr sacar algunos que se pasaron".

Juan Carlos Yáñez, Vecino del sector

2 a 3 contenedores de basura, dentro de los próximos tres días, pretenden sacar desde la vivienda para terminar con la limpieza.