La tristeza desapareció del camarín de Universidad Católica. Tras un triste final en el Torneo de Apertura, copa que dejó escapar frente a Audax Italiano, el conjunto cruzado se desquitó en la liguilla, cumplió la tarea de dar vuelta el marcador frente a Palestino y de este modo accedió a la Copa Sudamericana.

El elenco árabe tenía la primera opción de ganar, ya que en el encuentro de ida había ganado por 2-1. Sin embargo, el trabajo constante de la UC en el ataque consiguió que el global se colocara 5-3 a su favor.

La revancha cruzada

El encuentro comenzó con precisión y rapidez desde ambos elencos. Palestino apostó por la velocidad y el robo de pelota, mientras que la UC buscó los espacios posibles para llegar al arco de Luis Marín.

Los avisos de Palestino fueron constantes. A los 15 minutos, César Cortés tuvo la oportunidad de abrir el marcador, pero su lanzamiento terminó desviado. Lo mismo hizo Agustín Farías a los 19', pero Toselli logró atajar su remate.

A los 27 minutos, Nicolás Maturana envió un remate con efecto que no llegó a puerto. Estas acciones desequilibraron el escenario a favor de Palestino.

Por su parte, los cruzados destacaron por su irregularidad, cediendo jugadas que en más de una ocasión pusieron en riesgo su desempeño.

Pero la UC también tuvo momentos de lucidez. Segundos antes de los 30 minutos, David Llanos aprovechó un tiro libre que rebotó de las manos de Marín para lanzar un remate cruzado que el meta tricolor no alcanzó a atajar.

El gol dio buenos bríos al conjunto universitario y el complemento puso más suspenso al encuentro. Apenas comenzado el segundo tiempo, un tiro libre de Vargas casi resbala de los guantes de Marín, quien logró mandarla atrás de su arco.

Palestino bajó su potencia a la espera de una oportunidad y logró el empate a los 67 minutos, cuando Marcos Riquelme, coronado como el goleador del Torneo de Apertura, tiró un zapatazo al segundo paso que se coló en la muralla de Toselli.

Sin embargo, la alegría árabe se esfumó a los 70 minutos. Vargas iba en busca del segundo gol cuando Marín sacó el balón y el pie de Farías decretó el autogol que hizo estallar el San Carlos de Apoquindo.

Los cruzados nuevamente se encendieron, así como Vargas, quien a los 74 minutos lanzó un remate bajo que sobrepasó la zaga y dejó sin opciones a Marín.

Pero la Católica no logró saciar su sed. A los 84 minutos, y en un intento de dejar atrás las polémicas que protagonizó este año, Michael Ríos aportó con el cuarto gol y con ello el cierre de la revancha de la UC.