Las dos Coreas alcanzan un acuerdo para rebajar las tensiones militares
Corea del Norte y Corea del Sur alcanzaron ayer un acuerdo para poner fin a una tensa crisis militar después de tres días de maratonianas reuniones de alto nivel.
Según explicó Kim Kwan-jin, director de la Oficina de Seguridad Nacional de Corea del Sur, Pyongyang accedió a lamentar su ataque con minas del 4 de agosto pasado, que provocó un intercambio de fuego de artillería, y prometió hacer esfuerzos para no recurrir a más provocaciones.
Por su parte, el Gobierno de Seúl acordó apagar a las 12.00 hora local de hoy (03.00 GMT) los altavoces que emiten propaganda en la frontera contra el régimen de Kim Jong-un.
Corea del Sur comenzó las transmisiones propagandísticas hacia el Norte a principios de este mes por primera vez en 11 años, como represalia por la colocación de las minas terrestres.
El Gobierno de Corea del Norte pidió repetidamente que se pusiera fin a estas transmisiones al considerarlas un insulto a su dignidad.
Altos representantes de las dos Coreas llegaron al acuerdo tras negociar desde el sábado de manera prácticamente ininterrumpida en la Aldea de la Tregua de Panmunjom, ubicada en la frontera del paralelo 38.
El principal representante de Seúl en las negociaciones calificó el gesto de Pyongyang de admitir los ataques como "muy significativo", según declaraciones recogidas por la agencia local Yonhap.
Hasta ahora Corea del Norte había negado su implicación en el incidente de las minas y aseguraba que no disparó proyectil alguno, acusando a Seúl de haber inventado los hechos.
Desde el pasado jueves, la tensión entre las dos Coreas había alcanzado un alto grado y Pyongyang llegó a calificar la situación "casi estado de guerra".
Las maratonianas sesiones de diálogo fueron protagonizadas por cuatro de los altos cargos más influyentes de Seúl y Pyongyang. Frente a Kim Kwan-jin, ex ministro de Defensa del Sur, se sentó Hwang Pyong-so, vicemariscal y director del buró político del Ejército Popular de Corea del Norte, considerado "número dos" del Estado comunista.