La explosión de Lionel Messi y el oportunismo de Luis Suárez rescataron al Barcelona cuando la final se le ponía cuesta arriba. Con un toque latinoamericano, el conjunto catalán se coronó por quinta vez en la Liga de Campeones de Europa al superar ayer por 3-1 a la Juventus y lograron la Liga de Campeones, la Liga española y la Copa del Rey.

De esta forma, se convirtió en el primer equipo de la historia en lograrlo en dos ocasiones. Su anterior triplete fue en 2009, con Josep Guardiola como entrenador.

Y Claudio Bravo, quien estuvo en el banco de suplentes, se convirtió en el primer futbolista chileno en levantar la Liga de Campeones.

El gol de Ivan Rakitic, a los 3 minutos de partido, le permitió al Barcelona romper muy pronto el planteamiento defensivo que la Juventus tenía en mente.

La idea planteada por los italianos sorprendió al Barcelona, ya que apostaron por tener el balón, cuando la lógica indicaba que elegirían el contraataque como arma ofensiva.

Vidal -quien fue amonestado a los 11 minutos y abandonó a los 78- y Pogba dieron buenas salidas desde atrás y tanto Morata como Tévez obligaron a la defensa del Barcelona a replegarse.

Pero el conjunto azulgrana no se sintió intimidado.

El primer disparo de la Juventus no llegó hasta el minuto 44.

Messi casi no apareció en la primera parte y solo Luis Suárez ayudó en el despertar atacante del conjunto azugrana con dos ocasiones consecutivas en el minuto 38.

El encuentro se fue al descanso con una sensación de equilibrio mayor de la esperada, aunque con ventaja del Barcelona.

El marcador se equilibró a los 55 minutos en una jugada que nació de un asombroso taco de Marchisio. Tévez disparó, Marc-André Ter Stegen repelió y Morata apareció libre de marca para empatar.

Aunque corrió como siempre y trató de interrumpir el juego del Barça, el rendimiento de Vidal, quien se dio maña para armar los ataques de su equipo, distó de otras actuaciones en el torneo.

la diferencia de messi

En el minuto 66, la Juventus protestó un posible penal de Alves sobre Pogba. Fue un momento trascendente, pues el Barcelona marcó su segundo de inmediato. Messi se aprovechó de la tensión y realizó su primera intervención importante con un disparo al que respondió Buffon, pero el arquero desvió deficientemente la pelota, que cayó en los pies de Suárez. El uruguayo no perdonó y aventajó a su equipo.

Barcelona se dedicó a "dormir" el partido con el manejo de la pelota. Ante un rival ansioso, tuvo ocasiones de aumentar el marcador y lo logró en el descuento, a través de Neymar.

Barcelona alcanzó a Bayern Munich y Liverpool con cinco cetros en el máximo certamen continental. Los supera el Milan con siete y el Real Madrid, que conquistó la décima copa en la final del año anterior.

El delantero uruguayo Luis Suárez destacó, tras la victoria de su equipo, que para ganar "estos torneos hay que sufrir".

"Fue increíble. El ambiente, el resultado. Para ganar estos torneos hay que sufrir y se ganó un partido sufrido", dijo el uruguayo al terminar el encuentro.

El atacante, que marcó el segundo gol de su equipo, reconoció que el conjunto italiano puso en aprietos al Barcelona tras el empate: "Ellos tras el empate apretaron más y tuvieron ocasiones. Pero tenemos jugadores que marcan la diferencia".

El italiano Gianluigi Buffon aceptó la derrota como algo que forma parte del deporte.

"Las decepciones forman parte del deporte. Hay que aceptarlo así", dijo el arquero de la Juventus de Turín a la televisión Sky Italia tras la derrota de su equipo.

"Tuvimos muchos buenos momentos que también disfrutamos con nuestros fans. Es una pena que no lo hayamos conseguido", agregó el portero de 37 años. El capitán de la Juve se mostró contento con la temporada.