Efectos de la desaceleración se hacen sentir en la región de Atacama
Economía. La autoridad regional llama a no 'sobreendeudarse'.
patricio miranda
INFOGRAFÍA: VIVIAN CONCHA
Las últimas cifras económicas de la región de Atacama no habían sido buenas y hoy sus efectos se vieron reflejados en distintos sectores productivos. Según el cuarto informe coyuntural del Instituto Nacional de Estadística (INE), la zona presenta una disminución en la generación y distribución de energía, en las ventas reales de los supermercados y en la edificación.
En junio del 2014, comparado con igual mes del año anterior, los indicadores de generación y distribución de energía eléctrica registraron decrecimiento de 9,8% y 4,5% respectivamente.
En tanto, los otros indicadores coyunturales de análisis, Índice de Ventas de Supermercados (ISUP) y edificación total (habitacionales y no habitacionales), también presentaron un retroceso en comparación a junio de 2013. Así, el ISUP real experimento una disminución de 6,3% en junio de 2014, respecto a igual fecha del año anterior, siendo el segundo más bajo a nivel nacional.
Por su parte, la edificación total, medida a través de la superficie autorizada de los permisos de edificación para obras nuevas y ampliaciones, tanto habitacionales como no habitacionales, registró un baja de 38,4% en doce meses.
El seremi de Economía, Mario Silva comentó sobre los resultados que 'es una reacción esperable ante las cifras no tan buenas que nos han acompañado durante estos últimos meses, la comunidad se torna mas restrictiva y previene procurando proteger la economía familiar'. Además enfatizó que 'seguimos generando empleo, lo que es esencial para mantener la actividad económica estable. Desde ese punto de vista estamos tranquilos y esperamos que la comunidad también lo entienda así. Es necesario eso si evitar el sobreendeudamiento de la gente'.
Para el presidente de la Corporación para el Desarrollo de la Región de Atacama (Corproa), Daniel Llorente, las cifras son señales muy claras de la desaceleración de la economía y que 'en Atacama está pegando fuerte'. Añadió que en Vallenar los supermercados han presentados una disminución del 40% en las ventas y la hotelería ha bajado a cifras inferiores al 15%.
Llorente finalizó que aún no se ha llegado al punto más crítico y recordó que 'hemos tenido en la historia situaciones peores que estas'.
'Es una reacción esperable ante las cifras no tan buenas que nos han acompañado durante estos últimos meses, la comunidad se torna mas restrictiva y previene procurando proteger la economía familiar'.