El principal asesor económico de la Casa Blanca, Jason Furman, cree que la "recuperación" económica "continúa" en EE.UU., aunque reconoce que "aún queda mucho trabajo para deshacer todo el daño provocado por la recesión".
"La economía continúa su recuperación, el desempleo sigue cayendo rápidamente pero todavía es inaceptablemente alto, y aún queda mucho trabajo para deshacer todo el daño provocado por la recesión", afirma Furman, en una entrevista concedida a la agencia informativa EFE.
La tasa de desempleo en EE.UU. cerró en enero en el 6,6%, el dato más bajo en cinco años, y el ritmo de expansión del Producto Interior Bruto (PIB) repuntó hasta el 3,2 % en el último trimestre de 2013.
Durante la entrevista, realizada la semana pasada en la sala de prensa de la Casa Blanca, Furman destaca el progresivo "retorno a la normalidad" que vive la economía estadounidense.
"Hemos logrado un acuerdo presupuestario a finales de diciembre, que revocó parte del recorte (previo del gasto público) y así poder invertir más en infraestructura y educación", indica.
Además, Furman se refiere al pacto alcanzado la semana pasada en el Congreso para ampliar la capacidad de endeudamiento hasta marzo de 2015 y alejar así el fantasma de una nueva crisis que sitúe al país al borde de la suspensión de pagos.
"Y ahora, asegurándonos de que mantenemos la credibilidad del Gobierno de EE.UU. por al menos otro año, nos ponemos en posición para tener un mayor crecimiento en el sector privado en 2014", agrega el profesional.
Furman, un prestigioso economista de 43 años, fue nombrado presidente del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca en agosto del año pasado.
Para consolidar esta recuperación, el Presidente estadounidense, Barack Obama, ha calificado el 2014 como "el año de la acción", y por ello la semana pasada, para mostrar el camino, firmó un decreto por el que elevó el salario mínimo para ciertos empleados federales de US$ 7,25 a US$ 10,10 la hora.
"Nos encantaría ver a ciudades, estados, otros negocios y sobre todo al Congreso hacer lo mismo", recalca Furman, al señalar que es importante que los republicanos y demócratas puedan ponerse de acuerdo para extender estos beneficios a todos los ciudadanos.
Precisamente, de cara al futuro, el principal asesor económico de la Casa Blanca apunta como el "desafío más importante expandir las oportunidades para la clase media y asegurarnos de que se benefician del crecimiento económico que hemos visto".
La desigualdad económica, que ha crecido en las últimas décadas en EE.UU., es uno de los principales caballos de batalla económicos para la Administración Obama.
Furman, neoyorquino formado en Harvard, es considerado una de las jóvenes figuras en alza dentro de la Casa Blanca, y ha ayudado a diseñar la nueva política económica del segundo mandato del Presidente Obama, con especial énfasis en la clase media.
El economista es, además, un experto malabarista, afición que figura en todos sus perfiles y que sin duda le ha permitido progresar en las agitadas aguas políticas de la capital estadounidense desde su breve paso por la Administración de Bill Clinton aún como estudiante a finales de la década de 1990 y luego en la fallida campaña presidencial del actual secretario de Estado John Kerry en 2004.
Furman también celebra el repunte en la economía global, con la consolidación del crecimiento en EE.UU. y la estabilización de la eurozona.
"EE.UU. se beneficia cuando el resto del mundo crece. No hay duda de que uno de los principales retos que encaramos en los últimos dos años han sido cuestiones como la crisis de la zona euro", apunta.
Acerca de la situación al otro lado del Atlántico, precisamente, constata que "ha dejado atrás las fases más severas de la crisis".
"(En Europa) han avanzado de una crisis muy dura en la que estaban hace año y medio (...) y ahora las prioridades más importantes son las reformas estructurales, por ejemplo del sistema bancario, para continuar solucionando sus desafíos y evitar la siguiente crisis", concluye el asesor económico.
El sábado, el Presidente Obama firmó una legislación que eleva el límite del endeudamiento de EE.UU. hasta marzo de 2015.
Sin un incremento al límite legal de endeudamiento, el Gobierno de EE.UU. podría haber incumplido algunas de sus obligaciones y habría tenido que suspender algunos programas.
En la eurozona, la economía creció levemente más de lo previsto en los últimos tres meses de 2013, según un informe oficial publicado el viernes pasado. Si bien el crecimiento en la unión monetaria de 18 naciones sigue siendo débil, con una tasa anual de 1,1%, fue el tercer trimestre consecutivo de la eurozona en territorio positivo. Creció también la Unión Europea mayor, de 28 miembros, y Alemania y Francia, los dos mayores miembros de la eurozona, encabezan en repunte.