Prueba Inicia y el juicio al profesor recién egresado
Recientemente fueron informados resultados de la Prueba Inicia y, como siempre, son deficientes, lo que motiva el fervor de la sociedad por juzgar tempranamente tanto al docente recién egresado como a la universidad formadora. En ese marco, resulta oportuno detenerse en el contenido de la prueba Inicia y, desde ahí, juzgar el desarrollo personal y profesional. Ello, para aportar, más que para fracturar la carrera profesional de quien comienza, sobre todo hoy, que el ejercicio docente resulta tan complejo.
El juicio apresurado es perjudicial porque lleva a generar afirmaciones equivocadas que confunden a la sociedad y, desde ahí a un juicio que poco contribuye al desarrollo del nuevo profesor. Por cierto, los programas de formación deben mejorar, necesitamos profesores universitarios de calidad, oportunidades inmediatas para los egresados de pedagogía, salarios ad hoc y mejores criterios de selección, entre otros.
Creo que no necesitamos una Prueba Inicia obligatoria, pensada para la participación de los nuevos profesores, sino una medición pensada para el desarrollo profesional. No podemos pensar en una Prueba Inicia obligatoria, ya que aún es frágil metodológicamente.
No debemos juzgar, para empañar las ilusiones de quienes decidieron ser profesor/a para contribuir a un Chile mejor, sobre todo cuando no conocemos los antecedentes y alcances de una prueba estandarizada como la Prueba Inicia.
Eduardo Ravanal Moreno Universidad Central
Número Uno
El homenaje de la ATP a los Nºs 1 del tenis, volvió a las noticias el hito deportivo que nuestro Marcelo Ríos fuera uno de ellos, según la historia el único "Number One" que hemos tenido, pero Estimado Director, sin entrar en polémicas, Ud. estará de acuerdo que los chilenos tenemos muchos más Números Uno, basta que nos acordemos de la frase "…somos número uno para…", sacar la vuelta, perder el partido en el último minuto, tener mala memoria, gastar lo que no tenemos, comer pan, dejar las cosas para última hora, justificar lo injustificable, organizar un asadito, tener pitutos y movidas, inventar "chivas" para sacarse un pillo, tropezar con la misma piedra y tantas otras, pero también se ponen serios y son Números Uno en las campañas para ayudar al prójimo, como la Teletón, en las tragedias que cada cierto tiempo ocurren, para bien ó para mal así somos, en particular en el presente estamos insertos en el quehacer político, buscando al Número Uno para que dirija al país, pero más que buscar ó querer tener "Number One" en algo para Chile, lo que debiera ser primordial para todos es llegar a que Chile lo sea, en Salud, en Educación, en Trabajos bien remunerados, ve Director ya me puse político, consideré Ud., a propósito, que todos los candidatos también son Numeros Uno para encontrarle solución a todos los problemas de la Sra. Juanita durante la campaña y para perder la memoria después de elegidos y los que pierden son número uno para desaparecer hasta la próxima elección…
Luis Enrique Soler Milla
Calles para las bicicletas
Me pregunto por qué las autoridades en Copiapó no piensa en repetir en la ciudad una iniciativa que hay en Santiago, de dejar los días domingo calles exclusivas para que la gente se desplace en bicicleta. En unas de esas, la ciudadanía se entusiasma y vamos poniendo fin a los tacos.
Samuel Inostroza
Fe en el matrimonio
Errare humanum est. Errar es humano. Por ello creo en el divorcio, porque todos tenemos derecho a equivocarnos al elegir a nuestra pareja matrimonial. También respeto otras formas de relacionarse en pareja como es la convivencia. Es la alternativa para quienes no creen o se desilucionaron con el matrimonio. Pero si sabemos que las segundas nupcias representan el 25,87% del total de bodas celebradas en el país, y que sin estos divorciados vueltos a casar la cifra anual de matrimonios sería tan baja como en la década de los 50, ¿no le parece destacable que existan tantos divorciados que sigan creyendo en las virtudes del matrimonio por sobre otros modelos de vida en pareja? ?Por algo ha de ser, no?
Por ello pienso que habría que redoblar los esfuerzos por revertir la tendencia a la baja de los matrimonios primerizos. Hay que reencantar a las generaciones más jovenes y a quienes por un error en la vida, dejaron de creer en el matrimonio y no lo reitentan. Es que así como vamos, nuestra sociedad le está colocando fecha de vencimiento a la institución matrimonial. En estos 10 años he conocido miles de quiebres matrimoniales, muchos espantosos, pero créame, ningun otro modelo de vida en pareja tiene las virtudes del matrimonio.
Ricardo Viteri Prado Director SeparadosdeChile.cl